Una usuaria subió una foto de la carta a su cuenta y consultó si una de los ítems era «legal», los comentarios a favor y en contra no se hicieron esperar. Mirá de qué se trata.
Cuando salimos a comer elegimos el mejor lugar posible para llevarnos una grata experiencia y salir satisfechos. Los gastos se reparten, cada quien paga lo suyo o uno invita al otro, esas son las tres posibilidades que conocemos. Sin embargo, una usuaria de Twitter contó que cuando pidió el menú se encontró con un cargo extra que no esperaba.
La usuaria @fanfarriavital contó su experiencia con un local gastronómico de la Ciudad de Buenos Aires mientras leía el menú. «¿Esto puede ser legal no?», consultó la tuitera junto a la foto de la carta y remarcó en un cuadrado la parte que le despertó dudas.
«Todos los platos que se compartan tendrán un recargo de $230», dice la leyenda del menú debajó de la sección de platos especiales. Ante esta situación se despertó una debate en torno a este cobro, incluso la propia usuaria arrobó a la Dirección General de Defensa y Protección al Consumidor, y a la Defensoría del Pueblo en CABA.
En este sentido, hubo usuarios que no vieron correcto el cobro de más, pero otros lo justificaron ya que el local gastronómico es uno de los más concurridos de la ciudad porteña.
«No está mal. Si todos hacen lo mismo. Ocupan todas las mesas del local y comen la mitad de los que están. Es pérdida para el restaurante. Es lógico que si el plato se comparte saquen un crédito extra por el lugar que estás ocupando sin consumir», expresó una usuaria de nombre Fernanda.
Por supuesto que este razonamiento fue cuestionado por otro usuario: «Con tu lógica debería ser Citroen C4… si lo manejas solo, precio del vehículo $2.3 millones, si llevás a una persona $2.4 y si llevás a toda la familia $2.7 millones».
«¿Por qué no lo sería? Tenemos que asumir que alguien puede querer brindar un servicio, ponerle valor y otro querer pagarlo, sin hacer escándalo por todo. No te gusta: no vas. Punto», le cuestionó otra usuaria por la «legalidad» de cobrar un monto extra por compartir plato.
En ese sentido, otro aportó: «No es un tema de judicializar todo. Si la ley no lo permite y lo están haciendo, el ‘si no te gusta no vayas’ dejaría que la empresa siga yendo contra la ley que lo prohibe. Él/Ella no dijo ‘no me gusta’, preguntó si era legal nada más».
Otros se detuvieron en los precios de la carta: «Convengamos que un plato de fideos con pollo y verduritas a $1300 tampoco puede ser legal».