Sebastián Queijeiro, representante legal de la familia de Fernando «Lechuga» Pérez Algaba, habló de los avances de la investigación.
Sebastián Queijeiro, abogado de la familia del empresario asesinado Fernando «Lechuga» Pérez Algaba, cuyo cuerpo apareció descuartizado en un arroyo de la localidad de Ingeniero Budge, dialogó con C5N y manifestó que no se trata de un «crimen común» y que se están barajando varias hipótesis.
Ante las distintas amenazas y versiones que se difundieron tras la aparición del cuerpo del empresario, Sebastián Queijeiro señaló: «No soporta ningún análisis el homicidio y la tortura. Han dicho un sin fin de cosas que son mentira y no tienen nada que ver con el hecho, a tal punto que los medios tenían más audios que nosotros».
«El expediente está bajo secreto de sumario, para que no se entorpezca la investigación y se están tomando testimoniales. Ante la mecánica del crimen, la gente tiene miedo de declarar. La víctima no se puede defender y no está bueno que se digan las cosas que se están diciendo», remarcó.
En tal sentido, el letrado comentó: «Claramente no es un crimen común y es algo en lo que coinciden todas las fuerzas de seguridad. Hay dos hipótesis, o fue algo para querer dar un mensaje mafioso o fue un apriete que le quisieron dar por una deuda, porque tiene dos disparos de bala».
En cuanto a la persona que se encuentra detenido, aclaró: «No vemos un grado de autoría del crimen sobre esta persona, igualmente está procesada».
Al ser consultado por las amenazas que salieron a la luz, expresó: «Se entiende por los mensajes que tenía deudas. Él era un persona que arrancó jovencito con distintos trabajos, luego cobró una sucesión y otra plata que había ahorrado arrancó con la compra y venta de autos, y escaló a la venta de autos de lujos».
«En plena pandemia incursionó en todo el tema de las criptomonedas, era una persona hábil para los negocios y entiendo que hizo mucho dinero con eso. Una de las hipótesis puede ser que gente que creía en él le dio dinero para poner en esa rueda y no la habría podido devolver», cerró.