“No me arrepiento”, dijo a TN Jennifer, una de las involucradas en el ataque. Según dijo, habían denunciado hace más de un mes situaciones de maltrato y discriminación en la Escuela Primaria N°17 pero las autoridades no les dieron respuestas.
Jennifer, una de las mamás que le dio una golpiza a una maestra a la salida de una escuela de la localidad bonaerense de Marcos Paz, justificó el ataque al decir que ya había denunciado situaciones de maltrato físico y verbal en el aula y que las autoridades de la Escuela Primaria N°17 no actuaron.
“Nosotros accionamos mal, pero acá está accionando mal el adulto. El que tiene que cuidar a los chicos, la segunda mamá de la casa”, sostuvo la mujer.
“Nosotros accionamos mal, pero acá está accionando mal el adulto. El que tiene que cuidar a los chicos, la segunda mamá de la casa”, sostuvo la mujer.
“Acá se ha torturado y maltratado a 24 chicos”, manifestó y dijo que denunciaron la situación hace “un mes y medio” sin obtener ninguna respuesta de la dirección de la Escuela Primaria N°17.
Según explicó, su hija le dijo que “no quería ir más” al colegio y le reveló los maltratos físicos y verbales que padecían en el aula. “La maestra nos agarra del oído y nos dice que somos unos inservibles. Que le damos asco, que no vamos a ser nadie en la vida”, le contó, según el relato de la madre.
La mujer comentó el caso en un grupo de Whatsapp creado para la fiesta de egresados y obtuvo otros testimonios de alumnos que también habrían sido víctimas de la docente. “Empiezan a mandar audio los nenes. A mí me hace esto, a mí me hace lo otro”, explicó.
“Está bien que digan que somos unas violentas, pero acá la que ejerce violencia sobre los niños es la docente”, manifestó la mujer, que dijo “no estar arrepentida”. “Eso es un cuarto de lo que ella le hizo en la cabeza a los chicos”, se justificó.
“Ningún título te da el poder de maltratar a una criatura. Una criatura de tan solo 10 años. No te da el poder de decirle que no van a ser nadie en la vida, por más que vengan a un colegio del Estado”, continuó. “Se cree que porque el pibe es pobre, le pueden decir lo que quieran. Y no es así. Mi hija es pobre. Y la mando acá porque no me queda otra”, continuó.
Según dijo, encararon a la docente en la esquina y la violencia se desató porque la mujer “dijo que no conocía a los nenes y que no la jodamos”. “Una mamá se le puso adelante y la corrió, la empujó. Entonces fuimos todas y la agarramos”, sumó.