El boxeador argentino se impuso por decisión unánime en Tokio y unificó los títulos FIB y AMB de la categoría super mosca.
El Pumita Martínez marcó una página dorada en la historia del boxeo argentino! El boxeador argentino (17-0/ 9 KO) se impuso por amplia decisión unánime ante el japonés Kazuto Ioka (31-3-1/ 16 KO), en Tokio, y unificó los títulos mundiales de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) y Asociación Mundial de Boxeo (AMB) de la categoría super mosca.
Como alguna vez lo lograron Pascual Pérez, Horacio Accavallo o Nicolino Locche, grandes leyendas del pugilismo nacional, el boxeador de La Boca -de 32 años- brilló en el estadio Ryogoku Kokugikan de la capital de Japón y se quedó con el triunfo por amplio margen en las tarjetas, por 116-112, 117-111 y 120-108 (más allá de que el trámite fue más cerrado, sobre todo sobre el final del combate).
El Pumita salió dispuesto a llevarse puesto a Ioka en los primeros asaltos. De hecho, lo hizo tambalear en el primer minuto de la pelea. El argentino se lució en la corta distancia y lanzó grandes combinaciones, con la zurda como principal arma.
Sin embargo, desde el sexto round, el experimentado Ioka -campeón mundial en cuatro divisiones distintas y quien ya venció a otros argentinos- cambió la postura y logró incomodar al boxeador argentino por momentos. De todas formas, Martínez no dejó que se luzca y cerró bien varios de los asaltos finales, algo que influyó en las tarjetas de los jurados.
De esta manera, el Pumita se quedó con un triunfazo por decisión unánime: Stanley Christodoulou (quien fue réferi del histórico triunfo de Víctor Galíndez contra Richie Kates) falló 117-111, mientras que Edward Hernandez Sr dio 120-108 y Jean Pierre Van Imschoot, 116-112. El púgil de La Boca escribió una página dorada en la historia del boxeo argentino, siguiendo los pasos de leyendas como Pascual Pérez, Horacio Accavallo y Nicolino Locche.