Hoy es la audiencia de oposición para César Sena y Marcela Acuña

Justo cuando se cumplen trece meses del crimen de Cecilia Strzyzowski, dos de los principales acusados buscarán revertir las imputaciones.

Hoy, desde las 9, César Sena, acusado de homicidio doblemente agravado por relación de pareja y en contexto de violencia de género (femicidio), y su madre, Marcela Acuña, sindicada como partícipe primaria, tendrán la audiencia de oposición con el juez de Garantías 2, Héctor Sandoval, con el objetivo de modificar las imputaciones realizadas en el requerimiento de elevación a juicio por los miembros del Equipo Fiscal Especial (EFE), Juan Martín Bogado, Jorge Cáceres Olivera y Nelia Velázquez.

El presunto asesino de la esposa de 28 años cuenta con la defensa a cargo de Gabriela Tomljenovic, mientras que Acuña sigue defendida por la abogada Rocío de Jesús Rodríguez. En esta instancia, el otro imputado como partícipe primario, Emerenciano Sena, no participará porque su defensor, Ricardo Osuna, optó por la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional, la cual ya se ha pronunciado desfavorablemente para el dirigente piquetero. Respecto a los señalados como encubridores que permanecen en prisión preventiva, no interpusieron recursos. Ellos son Gustavo Obregón, Gustavo Melgarejo, Fabiana González y Griselda Reinoso.

En cuanto a la querella ejercida por Gustavo Briend en nombre de Gloria Romero, madre de la joven asesinada según la Justicia, en la casa de Santa María de Oro 1460, tendrá audiencia el miércoles a las 9. Briend planteará ante el magistrado que el Ministerio Público Fiscal mantenga las acusaciones iniciales contra el clan Sena, donde los padres de César estaban investigados como coautores del sangriento hecho en el inmueble del matrimonio que fue detenido el 9 de junio de 2023.

Por su lado, el heredero del clan, estuvo oculto hasta el 10 de ese mes, entregándose cerca del mediodía en la comisaría Tercera, acompañado de una tía y un abogado, sabiendo que se había librado una orden de captura, y que la ley le estaba pisando los talones.