A Walter le llegó una factura de $980 mil, el triple de lo que le facturaban habitualmente, así que decidió tomar una medida drástica para ahorrar.
Un carnicero de Gualeguay, ciudad cabecera del partido homónimo en la provincia de Entre Ríos, tomó una drástica decisión después de que le llegara una abultada factura por el consumo de luz: pide a sus clientes que ingresen con linternas…
Walter, propietario de la tradicional carnicería que trabaja en el lugar desde hace 16 años, tomó esa decisión, anunciándola con un cartel en la puerta, luego de que le llegara una factura de electricidad por $980 mil, cuando pagaba como máximo $300 mil.
Y los vecinos y clientes, entendiendo la gravedad de la situación por la que atraviesa el comercio y al mismo tiempo también damnificados por las abultadas subas efectuadas por el Gobierno en los servicios públicos, concurren a hacer sus compras con linternas en mano.
“Empecé limpiando la sierra y preparando la tripa para el chorizo”, comentó con relación a sus inicios en el trabajo, y agregó que “algunos se enojan, pero otros se lo toman con humor. Están los que lo entienden y los que no”.
En declaraciones televisivas, añadió que “también algunos me tratan de payaso, pero la idea es bajar el costo, consumir menos electricidad” para así sostener los precios de venta; ventas que, por cierto, también caen en picada, como en todos los rubros del consumo popular y en todo el país.
“Bienvenidos, encienda su linterna para ser atendido. Gracias”, dice la pizarra fotografiada por vecinos y clientes, que se viralizó en las últimas horas.