Los operativos de inspección se realizaron este viernes, y la mercadería en mal estado fue incinerada. La mercadería estaba “en mal estado y no contaba con la documentación correspondiente para su venta”.
Tras varios operativos de inspección en distintos comercios de San Martín, la policía decomisó carne bovina y porcina que, a pesar de encontrarse en mal estado de conservación, se ofrecía para la venta a los clientes. Este viernes, el personal policial y agentes de Bromatología municipal visitaron los negocios, e incautaron 205 kilos de producto cárnico, de los cuales, 15 kg eran especie porcina y 190 de producto bovino.
La carne secuestrada se encontraba en mal estado, mala preservación de la inocuidad del alimento, pero además no contaba con la documentación correspondiente para su venta; por lo tanto, se la considera “no apta para consumo humano”. Tras el decomiso, se procedió a la destrucción por incineración según recomendación de Médico Veterinario Policial, informaron desde la fuerza provincial.