Gran indignación generó en Italia la absolución del portero de una escuela que le manoseó el trasero a una alumna de 17 años.
Según contó la joven, mientras subía unas escaleras en dirección a una clase con una amiga, sintió que le metían una mano por el pantalón, le tocaban los glúteos y le agarraban la ropa interior.
Al darse vuelta, comprobó que se trataba del empleado del instituto, Antonio Avola, quien le dijo: «Amor, sabés que estaba bromeando».
A raíz de ello, el hombre de 66 años llegó a juicio acusado de violencia sexual.
Pero, a pesar del testimonio de la víctima y su amiga, y de que el portero admitiera durante el proceso haber manoseado a la chica «en broma», el tribunal lo absolvió.
Tras establecer que los tocamientos duraron «entre cinco y diez segundos», los jueces determinaron que «no constituyen un delito».
«La repentinidad de la acción, sin ninguna insistencia en el manoseo», que debe considerarse «casi un roce», no permite «configurar el intento libidinoso de concupiscencia por lo general requerido por la norma penal», resolvieron los magustrados, según el fallo citado por el diario Il Corriere della Sera.
De esa manera, se desestimó la petición de la fiscalía de imponerle al acusado una pena de prisión de tres años y medio.
Protestas
La decisión judicial generó la reacción de la Asociación de Alumnos de Lacio, la región que incluye a la capital italiana.
«Estamos indignados (…) Una vez más, un toqueteo no es reconocido como tal, esta vez por su duración», señaló su presidenta, Tullia Narciso, citada por el diario Il Fatto Quotidiano.
«Es importante sentirse seguro en todas partes, especialmente en la escuela, que debería enseñar a reconocer y eliminar la violencia y la discriminación», remarcó.
En tanto, muchos estudiantes publicaron en redes sociales videos en los que se tocan el cuerpo durante diez segundos, junto a la expresión «palpata breve» (breve toqueteo) que se convirtió en tendencia, igual que el hashtag «#10secondi» (10 segundos).