Intendente de Corzuela fue detenido acusado de supuesto abuso sexual…”Es incomprensible, soy inocente”

Un intendente chaqueño fue reducido y entregado a la policía, el domingo por un hombre que lo denunció por haber manoseado a su hijo adolescente en un sector de baños, mientras sus familiares participaban de una misa en el Santuario del Señor de los Milagros de Mailín, Avellaneda.

El hecho ocurrió a las 11 de la mañana. De acuerdo con la presentación policial, la denuncia fue interpuesta por Daniel Fernández (56), policía federal jubilado, con residencia en Morón, Buenos Aires, que se encuentra circunstancialmente en Santiago del Estero.

Dijo que mientras participaba de la misa, junto a su hijo adolescente, quien tendría un leve retraso madurativo, antes de finalizar el oficio religioso, el joven se retiró solo hacia el sector posterior de la iglesia y habría ingresado al baño. Al regresar, habría comunicado a su padre que se sentía mal y le pidió salir.

Preguntado qué le sucedía, el joven habría relatado que en el pasillo del baño se encontró con un hombre que le tocó con sus manos las partes íntimas (genitales) y le hizo una propuesta indecente, con la aclaración: «… No le digas a nadie». Ya en la vereda, el menor habría señalado a un hombre como el autor de los hechos y el Federal jubilado lo interceptó y lo redujo.

Todos congregados en la policía local, el sospechoso fue identificado como Rafael Rubén Carrara (51), intendente de la localidad chaqueña de Corzuela, departamento General Belgrano.

Carrara negó rotundamente la acusación. «Mi esposa está enferma y asistimos con mucha asiduidad a la Virgen de Itatí y al Señor de Mailín. Allí, nos sentimos muy bien, contenidos, y siempre pidiéndole a Dios por mi esposa»  , aseguró el jefe comunal chaqueño a la prensa de Santiago del Estero.

Consultado sobre la acusación de abuso, relató: «Nada de eso ha sucedido. Fui al baño, pero no recuerdo nada fuera de la normal. Sí, que en el camino alguien me zamarreó y acusó de algo con su hijo, o algo así”.

Enfático, Carrara afirmó: «Tengo una función pública, pero más allá de todo deseo que esto se aclare. Soy inocente y desde el principio me puse a disposición de la Justicia» .

Aseguró que «todo me parece incomprensible, porque evidentemente se trató de un malentendido. Confío en los fiscales y en las autoridades. Pero lo más importante, vinimos a Mailín movilizados por la fe y mi esposa enferma y nada más», concluyó el funcionario.

Carrara se encuentra libre, «supeditado a la causa» y mañana será entrevistado en Cámara Gesell el adolescente, ante psicólogos, abogados y Fiscalía.