El ejército israelí aseguró que los rehenes que mató «por error» en Gaza desplegaron una bandera blanca y uno de ellos llegó a pedir ayuda en hebreo, según una investigación preliminar. Los familiares protestaron en Tel Aviv para exigir al Gobierno un nuevo acuerdo de intercambio con el movimiento islamista palestino Hamás.
El incidente comenzó cuando un militar israelí identificó a tres «personas sospechosas» que estaban saliendo de un edificio del barrio de Shejaiya, en el norte del enclave gobernado el Movimiento palestino. Las víctimas fueron identificadas como Yotam Haim (28 años), Alon Shamriz (26) y Samer El Talalqa (25).
Se conoció que «todos estaban con el torso desnudo y uno de ellos llevaba una bandera blanca improvisada con un palo y una tela», pero que igual un militar abrió fuego inmediatamente contra el grupo al grito de «¡Terroristas!» para avisar a sus compañeros.
En el descargo los soldados israelíes revelaron que creyeron «ser víctimas de una trampa», según el análisis del Mando Sur del Ejército israelí. De los 3 rehenes, 2 murieron en el acto y el tercero, herido, regresó al edificio y los militares comenzaron a escuchar gritos de «¡Socorro!» en hebreo.
Además, trascendió que «cuando el rehén volvió a salir del edificio, fue finalmente abatido por un segundo militar», según la fuente de la investigación citada por el medio local Times of Israel.
La investigación por la muerte de los 3 rehenes «por error»
La investigación inicial consideró que los dos soldados actuaron en contra de los protocolos de combate, antes de apuntar circunstancias «atenuantes» como el hecho de que las fuerzas en Gaza llevan días sin ver civiles palestinos.
Además, aseguraron que las únicas personas que ven de civil suelen ser milicianos de Hamás, que se presentan como desarmados mientras otros ocultos abren fuego contra los militares.
En ese sentido, el ejército se refirió al «acontecimiento trágico» ocurrido en una zona de la Franja de Gaza donde los soldados se enfrentan a una «gran presión», «intensos combates» y «numerosas emboscadas».
Según un responsable militar citado por la agencia de noticias AFP, a «algunos cientos de metros» del lugar donde se produjo el incidente hay un edificio con un «SOS» escrito en la pared. El Ejército investiga «si hay algún vínculo con los rehenes».
Por su parte, el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), el teniente general Herzi Halevi, asumió la responsabilidad del Ejército en lo ocurrido, un hecho que describió como «doloroso» y «difícil».