El Salario Mínimo que hoy equivale a USD 200 pasaría a USD 46 en forma automática.
*Por Fabricio Bolatti
El impacto de la medida estrella de Javier Milei, la dolarización de la economía, en el escenario actual es inevitablemente generar hiperinflación, pérdida de competitividad, desempleo, ajuste del gasto público, pérdida de gran parte del poder de compra de nuestro ingreso, imposibilidad de ejercer derechos humanos y constitucionales como el acceso a la educación y salud pública y más malas noticias.
El candidato a presidente favorito por las y los electores de las PASO, embandera como una solución segura la propuesta de dolarizar la economía argentina, lo que implica eliminar el peso como moneda de cambio y que se nos traslade la inflación de Estados Unidos, propuesta que hasta suena linda, ya que permite imaginarnos con papeles verdes en la billetera, pero lo que se olvida o intencionalmente deja de explicar, son las consecuencias de esa medida en la vida del pueblo argentino.
La inflación generada intencionalmente por la gestión Macri/Cambiemos/FMI para empobrecernos
Después de generar en sus cuatro años, la gestión Macri /Cambiemos / FMI, una gran devaluación de peso que provocó alta inflación, congelamiento salarial, que pulverizó la mitad del salario, jubilaciones y todo ingreso laboral o previsional, de tomar deuda externa por 103.000 millones de dólares y solo ingresar el 20% de éstas divisas al país, permitiendo la fuga o saqueo de más de 80.000 millones de dólares (casi tres reservas del Banco Central de hoy), y de incrementar el gasto en intereses anuales de Deuda Pública a pagar en un 400%, hoy la oposición de Cambiemos se permite dar consejos y hablar de cómo se supera esta actual crisis.
No es el caso del líder de Libertarios, Javier Milei, que no estuvo a cargo del Gobierno Nacional y que sí viene hablando y proponiendo un esquema para salir de este escenario de inflación: la dolarización de la Economía, adoptando a esta moneda como la oficial y reemplazando al peso en su función de moneda de intercambio, lo que terminaría con la posibilidad de devaluar la moneda, y con ello la inflación que se puede generar por el cambio de valor del dólar, necesario para el intercambio con el mundo.
Sin inflación, pero sin trabajo, sin educación y sin salud pública y gratuita
Lo que no dice Milei es que de ser aplicada su medida – y no cubierta la diferencia entre los dólares existentes y disponibles con los necesarios para reemplazar los pesos de la economía, y así unificar en la moneda extranjera el poder de compra que puede tener el pueblo argentino – en el escenario actual, con el nivel Reservas del Central, con el volumen de la Base Monetaria, los Depósitos y el Pasivo del Central, el valor del dólar debería ubicarse en 2440 pesos, lo que significa una devaluación de más del 200%, lo que provocaría una aceleración de aumentos de precio, a lo que se debe sumar el incremento que se va a dar automáticamente por no poder expresar la diferencia existente entre precio nacional y extranjero, perdiendo ventajas que el país tiene sobre la economía internacional, como ser alimentos, combustibles, automóviles, etc, que dejarán de aplicarse, impactando en el bolsillo del pueblo.
Esta pérdida de poder adquisitivo que bien se expresa en el valor del Salario Mínimo que hoy supera los 110.000 pesos y equivale a cerca de 200 dólares, pasaría en la genialidad de Milei a valer menos de 50 dólares, pulverizando más del 70% del valor de compra de los ingresos que hoy percibe gran parte del pueblo argentino, lo que impactará por su generalidad, en el consumo y por ende en la actividad económica negativamente, provocando cierre de empresas, desempleo, menos recaudación de estamentos públicos, no se podrá incrementar salarios, llevando ciento de miles de familias a la pobreza e indigencia, fuerte ajuste del gasto público, eliminación de la obra pública, entre otras.
En síntesis, será sin inflación el futuro que propone Milei, pero también será sin trabajo, sin educación pública, sin salud, sin ingresos previsionales, sin nuevos jubilad@s, con el 30% de los ingresos para quien mantuvo el trabajo, sin aguinaldo, sin vacaciones y sin el patrimonio de todas y todos los argentinos que constituyen el capital del Banco Central, lo que será entregado y rematado para aplicar esta nefasta medida.
Dolarización: es perder calidad de vida en tiempo récord
Tener una moneda propia permite a un país contar con una herramienta de política monetaria que puede ser usada para dar mayor competitividad a la producción local y protegerla de efectos negativos provenientes del contexto internacional, así como poder capitalizar y trasladar a todo su pueblo, el beneficio de las ventajas que puedan provenir de la existencia y uso productivo de sus recursos naturales, de infraestructura, laborales, etc., así como financiarse hasta cierto límite, sin costo financiero perjudiciales al país.
Debería ser suficiente, ver que todas las potencias y países desarrollados del mundo tienen su moneda propia (junto a otros países aliados), y que solo 11 países en el mundo se ataron al dólar, generando condiciones de competencia de igual a igual con una de las potencias mundiales, como ser Estados Unidos, y está a la vista que son prácticamente Colonias de este país, como Ecuador y Perú.
La Patria os lo demanda
Es necesario, “la Patria os lo demanda”, detenerse a ver, conocer y entender las propuestas o políticas planteadas por cada candidata o candidato para estas elecciones que vienen, pero especialmente las de quien captó la mayor parte del acompañamiento o apoyo popular, para ser quien decida y ejecute políticas en nombre y para todo el pueblo argentino, como lo es el libertario Javier Milei.
*Concejal de la ciudad de Resistencia
*Candidato a la Presidencia del Concejo por el Frente Chaqueño