La jueza Fernández descartó investigar a Gloria Romero y limitó la cesura a la definición de penas

La segunda jornada de cesura en el caso Cecilia Strzyzowski avanzó este jueves con una resolución central: la jueza Dolly Fernández rechazó los pedidos de las defensas para abrir una causa por presunto falso testimonio contra Gloria Romero, madre de la joven. Sostuvo que esos planteos fueron presentados fuera del tiempo procesal y que, además, “no guardan relación con esta instancia”.

Fernández recordó que la cesura no habilita nuevas investigaciones ni revisiones sobre responsabilidades ya juzgadas, sino que se circunscribe únicamente a la determinación de las penas luego del veredicto del jurado popular. Por esa razón, también desestimó el pedido para investigar a Ronald Amarilla.

En paralelo, la jueza autorizó la producción de informes médicos, psiquiátricos y periciales solicitados por las defensas de los Sena y otros imputados. Aclaró que estos estudios se realizarán fuera de la audiencia y solo tendrán efectos sobre el control y seguimiento de los detenidos, o, eventualmente, sobre alguna pretensión de morigeración, sin incidir en la pena final.

La magistrada negó la incorporación de expedientes en trámite, testimonios previos u otros elementos que pudieran interferir con causas paralelas o generar contradicciones procesales. Señaló que aceptar ese material podría afectar principios como el de inocencia o congruencia.

En cambio, habilitó la incorporación de informes de reincidencia actualizados para todos los acusados, así como testigos de concepto e informes estadísticos requeridos para Fabiana González y Gustavo Obregón.

Con estas definiciones, Fernández dispuso que la audiencia continúe enfocada exclusivamente en la mensuración de la pena, mientras la fiscalía y la querella exponen sus argumentos para sostener las sanciones más elevadas que prevé la ley.