«La pareja le pegó, yo no hice nada», declaró el acusado de tener cautiva a una mujer y abusar de ella

A pesar que su defensor le aconsejó no hacerlo, el imputado declaró ante el fiscal. Para los investigadores entró en contradicciones. Seguirá detenido.

El acusado de mantener cautiva a una joven de 26 años  ocho días, de abusarla varias veces, golpearla y robarle declaró ante el fiscal a pesar de su defensor le aconsejó no hacerlo. Según fuentes de la investigación dijo incoherencias y se contradijo.

«Quiero declarar porque no tengo nada que ver, si yo me quedo callado me cae todo a mí», dijo el imputado  W. I. O que fue indagado en la fiscalía de Pilar por los delitos de: «privación ilegal de la libertad agravada en concurso con abuso sexual agravado por ser con acceso carnal, lesiones leves agravadas por ser cometidas en un contexto de violencia de género y tenencia ilegal de arma de guerra».

Ante el fiscal Manuel Cayuela y su defensor  afirmó que «la chica» mintió. El acusado señaló a la pareja de la víctima, que según él,  la tenía «sometida y no la dejaba salir». Que ella vio que él un fajo de dólares, que se quedó con algunos y el resto los escondió en la casa.

En su búsqueda de desvincularse el imputado declaró que ella tomó parte del dinero y no regresó a la vivienda. Le contó a «unos chicos y chicas. Estaban en mi casa, pero yo los eché porque hacían cosas malas. Ellos fueron y le robaron a la pareja de la chica». Según el imputado después de eso el hombre la encontró, la subió al auto y la torturó.

La denuncia de la víctima sostiene que ella caminaba a la casa de su tía en Pilar, y el imputado a punta de pistola la obligó a subir a su auto para llevarla a su casa de Moreno donde la tuvo cautiva y abusó de ella. Luego la golpeó junto a otras dos personas para que diera la dirección de su casa a donde fueron a robar.

Según el imputado ella quería ir con él, pero no podría porque tienen hijos y mujer. «La pareja de ella le pegó, yo no hice nada», insistió y afirmó: «estoy rehaciendo mi vida, hace seis años estoy en libertad y trabajando en un taller».

Dijo que la pareja de la víctima es su vecino. Ante la pregunta de cómo sabía todo lo que había sucedido, sostuvo que se lo había contado otro «chico». En cuanto a por qué tenía el arma sostuvo que por miedo a que los «narcos» del barrio le quieran sacar la casa.

Según dijo su familia al momento del allanamiento no estaban porque se encuentran viviendo en Pilar por el tratamiento médico de uno de sus hijos.

Se negó a la extracción para el cotejo de ADN.  Según los peritos  la mujer tenía heridas compatibles con abuso sexual y múltiples lesiones en el cuerpo producto de haber recibido varios golpes en la cara.

Se espera el resultado de las pericias al auto donde según denunció la víctima la obligó a subir y fue secuestrado el allanamiento. 

El imputado tras la indagatoria regresó al calabozo.