Los investigadores manejan una hipótesis con respecto al crimen de Magalí Noelia Gómez, de 27 años, quien el lunes por la mañana fue encontrada asesinada. Por el hecho permanece detenido su pareja, Agustín Pérez.
Las autoridades que investigan el femicidio de Magalí Noelia Gómez, quien el lunes fue estrangulada, Agustín Iván Pérez, creen que el sujeto consumó el asesinato tras una violenta pelea que se generó porque no quería que la muchacha, de 27 años, concurriera a su lugar de trabajo.
El sospechoso, quien se desempeña como vigilador privado, agredió a la mujer en un ataque de celos, ya que pensaba que tenía un amante. El cadáver de la víctima apareció en una zanja, en la localidad bonaerense de El Talar.
Voceros del departamento judicial de San Isidro revelaron a cronica.com.ar que aparentemente el hombre, de 38 años, mantuvo una disputa con su pareja porque que no deseaba que concurriera a trabajar al predio del Parque de la Costa, situado en el partido de Tigre.
De acuerdo a lo manifestado por los informantes, se presume que el individuo consideraba que la muchacha en realidad iba a aprovechar la salida para ver a un supuesto amante.
Versiones aportadas por testigos sostienen que Pérez le recriminaba frecuentemente a la mujer por dicho motivo.
Gómez fue encontrada asesinada, a las 9 del lunes, en una zanja situada en la esquina de 25 de Mayo y Las Violetas, en el Barrio La Paloma, en El Talar.
Con respecto al lugar del crimen, se dijo en un comienzo que Pérez, quien se desempeñaba en una agencia de seguridad privada, concretó el homicidio mientras se hallaba con la víctima a bordo de un Fiat Siena azul oscuro, dominio FQS101, aunque los efectivos policiales no descartan que en realidad el asesinato haya sucedido en la finca en la que vivía la joven, ubicada en El Pensamiento al 1700, en esa misma zona.
Tras ser apresado por los uniformados de la comisaría 6ª de Tigre, el sujeto afirmó: “Se me fue la mano”.
Peritos de la Delegación San Isidro de la Policía Científica revisaron el interior del domicilio y del mencionado automóvil, a la vez que consiguieron determinar que la víctima presentaba signos de estrangulamiento manual, varios moretones en el cuerpo y lesiones en los brazos (que serían de carácter defensivo).
Se comprobó que el sospechoso tenía arañazos en el cuello y detrás de las orejas.