A partir del 1 de enero, las prepagas de todo el país comenzarán a cobrar un copago por cada prestación médica. Aducen que es por falta de financiamiento. La decisión llega en momentos en que el sector acumula un incremento en el valor de las cuotas del 61% en los últimos meses.
A través de un comunicado difundido este domingo, la Federación Argentina de Prestadores de Salud (FAPS) dio a conocer la decisión que afectará a pacientes que deseen atenderse en clínicas, hospitales, geriátricos e instituciones privadas. También correrá para los casos en que los mismos deseen realizarse estudios en laboratorios.
«Es consecuencia de la crítica situación financiera del sector que se agrava año tras año y obliga a tomar estas decisiones», informaron desde la asociación.
QUIÉNES SE VERÁN AFECTADOS
En principio, los afectados serán aquellos que estén asociados a Galeno Argentina, Medife, Swiss Medical Group, Medicus SA, Omint SA, Obra Social Luis Pasteur, Osde, Cemic y Femedica.
Desde FAPS aducen que la medida es por el «aumento de los costos operativos y la cobertura de nuevos tratamientos, con ingresos regulados y atrasados respecto a la inflación, que genera un desfasaje económico, poniendo en peligro la sostenibilidad del sistema».
De acuerdo al comunicado, esta situación “obliga a tener que buscar alternativas para financiar el pago de salarios”, a través del cobro de un copago “que quedará a cargo de cada paciente de Prepagas y Obras Sociales de Dirección».
El monto del copago será de 9% de la prestación médica, informaron.
AUMENTOS DE CUOTAS
Cabe recordar que en lo que va del año, las prepagas registraron un incremento superior a la inflación al ajustar las cuotas en 61,04%. Asimismo, a partir del 1 de enero de 2022 comenzará a regir el último tramo aprobado del incremento autorizado que será del 9%.