Magalí Milagros Candela Azoya despareció el 27 de noviembre y dos días después encontraron partes de su cuerpo en un basural.
El 27 de noviembre de este año Magalí Milagros Candela Azoya, de 17 años, desapareció y dos días después hallaron en un basural de Lomas de Zamora restos de su cuerpo. En las últimas horas, a más de un mes del femicidio, se concretó la captura de un prófugo y ya son dos los detenidos en el caso.
Sandra Azoya, madre de Candela, denunció que el 27 de noviembre su hija se retiró de su domicilio para ir hasta la Plaza Santa Marta a retirar unas zapatillas que había comprado. Sin embargo, nunca regresó.
El 29 de noviembre, dos días después de la denuncia, vecinos notificaron que sobre las vías del Tren Roca hallaron, entre basura quemada, un pie humano semi calcinado, restos óseos quemados y prendas de vestir, las cuales fueron reconocidas por su madre.
Los detenidos fueron capturados tras un testimonio clave, realizado por una persona a la que se le reservó su identidad, quien mencionó que en la noche del 27 de noviembre se dirigió a un domicilio en la calle Terrada para comprar drogas, siendo atendido por los hermanos Fabio Resquín y Juan Resquín. Allí, tras pedirles que lo dejen entrar para consumir lo adquirido, “ambos le negaron el ingreso aludiendo que su amiga Candela estaba durmiendo”.
De acuerdo al parte al que tuve acceso la Agencia Noticias Argentinas, en la madrugada del 28 de noviembre los sujetos le pidieron “un carro de mano para ir a tirar basura a las vías, metiendo en su interior un bolso de lona grande, basura y un envase con nafta”. Por las cámaras de seguridad se estableció que lo que arrojaron fueron restos de la joven.
Además, el testigo agregó a su declaración que la víctima había llegado al domicilio de los hermanos junto a su primo Carlos Azoya, quien en un principio fue aprehendido, pero tras declarar que se fue antes del crimen fue liberado.
El 5 de diciembre se llevó a cabo la detención de Alan Daniel Vega, quien fue visualizado por las cámaras de seguridad mientras participaba de la quema del bolsón que contenía el cadáver de Candela, así como también de trasladar la botella con combustible. En dicha ocasión fue imputado por ser partícipe necesario en el hecho.
A más de un mes del hecho, las autoridades que llevan a cabo la investigación tomaron conocimiento que en la estación Constitución de la línea de tren General Roca, Anabella, la prima de la víctima, reconoció a Fabio Resquín mientras circulaba por el lugar.
“En un comienzo el acusado dio otra identidad, como así también intentó presentar un carnet de discapacitado, a nombre de otra persona, pero tras ser interpelado la policía, reconoció llamarse Fabio Resquín”, informaron. De este modo se tomó intervención y se llevó a cabo su detención.
Ahora la causa tiene a dos sospechosos detenidos, mientras que Juan Resquín, hermano del último capturado, continúa prófugo de la Justicia.