El partido en donde Argentina se consagró bicampeona de América, ante Colombia, estuvo manchado por incidentes en el ingreso al estadio y el gobierno de Donald Trump tomó una decisión al respecto, pensando en el Mundial 2026.
El gobierno de Estados Unidos decidió deportar a 2.000 colombianos tras los incidentes ocurridos en la final de la Copa América 2024 que disputaron Argentina y Colombia en el país norteamericano.
Las personas que estuvieron involucradas en los disturbios ocurridos en la previa del partido -en donde la “Albiceleste” se consagró bicampeona de América- que derivaron en enfrentamientos con las autoridades locales, serán quienes deberán dejar el país ahora comandado por Donald Trump.
Algunos de los implicados lograron salir del país antes de ser localizados, principalmente hacia Canadá, mientras que otros se ocultaron en distintas ciudades de Estados Unidos. Sin embargo, las autoridades lograron ubicarlos en zonas remotas, avanzando con el proceso de deportación.
Para aquellos que no cumplen con los criterios para ser expulsados, el castigo ha sido económico: las multas alcanzan los 20.000 dólares como sanción por su participación en los disturbios.
Estas medidas migratorias llegan pensando en la preparación para el Mundial 2026 que se realizará en Estados Unidos, Canadá y México. El objetivo será evitar incidentes similares, por lo cual el gobierno estadounidense ha iniciado un diálogo con la FIFA para implementar sanciones más estrictas contra los hinchas que intenten ingresar sin boletos a los estadios.
Por otro lado, la comunidad colombiana en el país norteamericano mostró su preocupación por estas medidas, ya que temen un aumento en la represión contra inmigrantes en el marco de esta política de control.