Fue tras un cambió de caratula. La familia de la víctima se enteró por los vecinos. Su mamá convoca a una movilización para mañana frente a los Tribunales de San Isidro. Además ya apelaron el fallo judicial.
Luna Ortiz tenía 19 años cuando fue captada por las redes sociales. El 2 de junio de 2017 en Tigre fue drogada, alcoholizada y llevada en un raid en el que la intercambiaban como mercancía, según relata su mamá. Su cuerpo fue encontrado el 3 de junio en la casa de Isaías Villarreal.
Este hombre fue condenado, pero tras un cambio de carátula quedó libre. «Está muy angustiada toda la familia. Nunca nos notificaron que lo liberaban», dice la mamá de la víctima, Marisa Rodriguez.
«El mismo tribunal que lo había condenado a 14 años ahora le da la libertad cuando solo pasaron cinco años por algunos vericuetos judiciales, porque preescribió uno de los delitos, de parte de la defensa del imputado sin tener en cuenta el contexto de violencia de género», sostiene la mamá, que junto al resto de la familia convoca a una movilización mañana a las 10 frente a los Tribunales de San Isidro. «Vamos a ver si podemos hablar con el juez. Ser atendidos a través de la ley de víctimas», agregó.
«Nos sentimos desprotejidos por parte de la Justicia. Nunca fuimos notificados por parte nuestra y de la abogada que le daban el beneficio de la libertad», reclama la mamá.
«Pienso que no tienen perspectiva en género, vulneran todas las leyes y tratados internacionales con respecto a las víctimas», considera Marisa.
«Nuestra abogada apeló a la Cámara de Apelaciones de San Isidro. Esta semana ya tendría que estar la resolución», señala.
«Cuando fue el juicio en abril de 2019 el Tribunal Oral 7 de San Isidro lo condena a Villarreal a 14 años de prisión con la carátula de abandono de persona seguido de muerte con suministro de estupefacientes. Al llegar a instancia de Casación sala 1 de La Plata, los jueces Maidana y Carral le cambian la carátula a homicidio imprudente con suministro. El 17 de mayo de este año se llevó a cabo una audiencia donde la defensa de Villarreal pidió el beneficio de la libertad, en esa misma audiencia presentamos pruebas con nuestra abogada que sigue teniendo las mismas maneras de captación en las redes como lo hizo con mi hija y le dijimos a los jueces Maria Cohelo, Alejandro Lago y Alberto Gaig que nos oponemos a la libertad de Villarreal”, recuerda Marisa.

«También les pedimos que tengan en cuenta que vive a seis cuadras de mi casa y que no sería justo por la peligrosidad que nos representa a la familia. Les dije a Luna ya no me la devuelven pero que por favor no lo dejen en libertad porque va volver a violar y vender a otra piba como mercancía», cuenta.
«Nosotros nos enteramos de que Villarreal se encontraba en libertad por vecinos y ex compañeras del colegio de Luna que lo vieron en el barrio. Cuando me entero llamo a nuestra abogada y nos dijo que nunca fue notificada. Fui al Tribunal y me confirmaron que era verdad que tenía el beneficio de la libertad desde el 18 de mayo. No lo podía creer que para estos jueces la vida de mi hija valiera solo cinco años de prisión», sostiene.
«Nosotros presentamos en 2021 un recurso de queja a la Corte Suprema de Nación y que pasaría si Villarreal seria condenado con la carátula de femicidio. No podemos entender como lo dejaron en libertad sin una condena firme», dice Marisa indignada con lo sucedido.
«Desde que nuestra hija Luna aparece asesinada en la casa de Villarreal el fiscal Marcelo Fuenzalida de la fiscalía de trata y género de San Isidro lo caratuló como abandono de persona seguido de muerte con suministro de estupefacientes. Ahí empezó nuestra lucha por la verdad y la justicia. Nosotros le planteamos al fiscal que Luna muere en un contexto y violencia y de hombres, y el contexto para femicidio», dice Marisa que desde el principio reclamó que se investigue como femicidio.