Alan Rodríguez, el joven motomandado baleado en un violento asalto en Barranqueras, enfrenta un panorama médico crítico. Según informó la doctora María Laura Lezcano, directora del Hospital Perrando, su estado se agravó durante el fin de semana, requiriendo una nueva intervención quirúrgica y la reconexión a un respirador artificial.
“Lamentablemente, durante el fin de semana se volvió a complicar y tuvieron que operarlo de nuevo. Es un paciente con riesgo de vida”, confirmó Lezcano.
La doctora explicó que el jueves pasado fue necesario reingresarlo a quirófano debido a un episodio febril relacionado con una posible infección en el pulmón derecho, afectado por el proyectil que recibió durante el ataque.
“Se presentó un hemotórax, es decir, presencia de sangre en el pulmón derecho, producto de la herida de arma de fuego. Esto generó complicaciones que derivaron en una neumonía intrahospitalaria complicada, lo que requirió nuevamente conectarlo a respirador artificial y comenzar un tratamiento con antibióticos”, detalló la directora del hospital.
Aunque el equipo médico esperaba comenzar a evaluar las posibles secuelas del ataque, las complicaciones agudas han retrasado estos análisis. “No podemos sacarlo del respirador todavía ni evaluarlo clínicamente en su totalidad. Quedó pendiente un estudio de imágenes para descartar compromiso en las vértebras o daño neurológico, ya que había reportado molestias en las piernas cuando salió del respirador”, añadió Lezcano.
La situación de Alan es monitoreada constantemente, pero el pronóstico sigue siendo reservado. “Es un paciente joven, pero las complicaciones, como las infecciones intrahospitalarias, aumentan con el paso de los días en terapia intensiva. Es un día a día, y seguimos esperando la evolución con el tratamiento quirúrgico y antibiótico”, explicó la médica.
Con información de N9