Una mujer de 45 años falleció en la ciudad rionegrina de Bariloche tras permanecer varios días internada en el Sanatorio San Carlos luego de contraer hantavirus, informaron fuentes oficiales.
Se trata de Ana Natalia Ayala, quien se desempeñaba como docente de un jardín maternal de la ciudad cordillerana y también había formado parte de la junta vecinal del barrio El Frutillar, quien murió ayer.
El Consejo Escolar y directivos y docentes expresaron su dolor por el deceso, al igual que sus vecinos. «Hoy falleció Natalia Ayala, una gran mujer, trabajadora, comprometida y amiga…triste noticia, mis condolencias a sus hijos y sus papás especialmente», dijo a través de sus redes sociales Betina Fernández, una pobladora del barrio y referente vecinal.
Desde el Parque Nacional Nahuel Huapi recordaron que para evitar el contagio de hantavirus recomiendan ingresar a lugares cerrados con barbijo (N° 95/99/100), protección ocular y guantes» y ventilarlo al menos 30 minutos antes de entrar.
Igualmente, mojar el suelo con lavandina diluida en nueve partes de agua fría, dejar actuar por 30 minutos y pasar un trapo húmedo para evitar que se dispersen las partículas
Al realizar paseos por ambientes naturales, pidieron tener en cuenta “no ingresar a construcciones o refugios de montaña abandonados, caballerizas, galpones, leñeras, ni dormir al aire libre» porque se trata de sitios «que son posibles moradas de roedores que por las noches tienen mayor actividad”.
Asimismo, pidieron “acampar en las áreas habilitadas, en lugares alejados de pilas de leña, inmediaciones de basura o matas de mucha vegetación”, utilizar carpas con piso y mantenerlas cerradas, y colocar la comida en recipientes herméticos, que no puedan ser mordidos por roedores.
El hantavirus es una enfermedad viral aguda grave, causada por el virus Hanta, que se transmite por el contacto con la orina, saliva y excretas de roedores infectados.
Los síntomas son fiebre, dolores musculares, de cabeza y abdominales, escalofríos, náuseas, vómitos, diarrea y en cuadros avanzados dificultad respiratoria.
El brote más grande de esa enfermedad se produjo a finales del 2018 con epicentro en Epuyén, donde 11 personas fallecieron, hubo 34 casos confirmados y 159 pacientes que debieron ser aislados.
Ese brote fue declarado como «finalizado» por las autoridades sanitarias de Chubut en marzo de 2019.