Mediante una reestructuración de incentivos para la fabricación de bienes de capital, ofrece la reducción de contribuciones patronales del 90% para MiPyMEs y del 70% para el resto de beneficiarias. «La actualización es algo positivo para los fabricantes de maquinaria agrícola nacional», expresó Eduardo Borri, presidente de la Cámara Argentina Fabricantes de Maquinaria Agrícola (CAFMA).
El Gobierno renovó el esquema de incentivos para la fabricación de bienes de capital, vigente desde 2001, que incluye a la maquinaria agrícola y con esta actualización de medidas busca darle un espaldarazo a la industria nacional y fomentar a la vez el agregado de valor en origen en un sector que viene mostrando fuertes índices de crecimiento.
Con la publicación en el Boletín Oficial quedó efectivamente en marcha este nuevo régimen de incentivos entre los que se destacan la reducción de contribuciones patronales del 90% para MiPyMEs y del 70% para el resto de beneficiarias.
El régimen también otorga un bono de crédito fiscal anual a las empresas por un monto equivalente a una proporción del costo de desarrollo, fabricación y exportación de los bienes industriales, además de incentivos adicionales a las compañías que certifiquen procesos.
En el caso de la fabricación nacional es del 40 % del Impuesto a las Ganancias. Para el ítem I+D (investigación y desarrollo), el 80 % del monto de las inversiones efectuadas en I+D por hasta un 2,5% de la facturación de la venta de los bienes fabricados. Para aquellas empresas que exporten se ofrece el 60% de los reintegros a la exportación. Para mejora contÍnua y calidad: el 30 % del monto y 15% para No PyMes
Según quedó estipulado para acceder a los beneficios de este régimen, por lo menos el 70% de la facturación total de los últimos doce meses debe corresponder a la venta de bienes industriales fabricados en territorio argentino, lo que incluye tanto insumos como servicios de diseño, ingeniería, instalación y montaje. Ese porcentaje del 70% podrá ser elevado o reducido en diez puntos si así lo dispone el Gobierno nacional.
En este marco, Eduardo Borri, presidente de la Cámara Argentina Fabricantes de Maquinaria Agrícola (CAFMA), detalló: «La actualización es algo positivo para los fabricantes de maquinaria agrícola nacional, porque fomenta las exportaciones del sector a través de un beneficio. En el régimen anterior, había máquinas que eran importadas y se vendían en el país, a pesar de lo cual cobraban un incentivo. Lo que la CAFMA siempre planteó fue que para tener un beneficio en la Argentina, es preciso que se fabrique localmente. Esta actualización va en línea y complementa lo que la CAFMA viene pidiendo: la Ley de Maquinaria Agrícola Nacional. Su objetivo es que el financiamiento de entidades oficiales sea otorgado a equipos de fabricación local».
Desde hace largo tiempo el sector solicita justamente la puesta en marcha de una Ley de maquinaria agrícola nacional, un sector que en los últimos años logró no solo salir de un profunda crisis sino también crecer de la mano de los altos precios internacionales de los commodities y las líneas de financiamiento ofrecidas por los bancos y las propias empresas. El Gobierno también busca que con estos incentivos crezca la producción nacional, las exportaciones y la sustitución de importaciones en un contexto en el la escasez de dólares es una constante.
Según la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara), en los primeros nueve meses del año los pateamientos de maquinaria agrícola crecieron 19% respecto al mismo período del año anterior. El dato a tener en cuenta es que en septiembre el índice dio negativo y es por eso que el Gobierno busca que las empresas no pierdan el rumbo de crecimiento en 2023 donde se espera además una caída considerable de los precios de los commodities.