«No le pueden quitar el derecho a la educación»: el reclamo de una mamá cuya hija con autismo debe cambiar de escuela

Sofía, una nena con autismo, se quedó sin vacante en un instituto de enseñanza privada de Temperley. Su madre acusa al colegio de discriminación.

«Cuando fui a pagar la cuota, en la administración me informaron que mi hija no tenía más matrícula», contó Alejandra, mamá de Sofía, una nena con autismo que estudiaba en el Instituto de Enseñanza Privada Juan XXII de Temperley.

«En diciembre me hicieron llevar a la nena a la etapa de intensificación y retomarla el 19 de febrero, pero ocho días después me advirtieren que busque otro colegio porque Sofía no podía permanecer», agregó la mujer.

A Alejandra le costó conseguir un acompañante que fuera con Sofía a la escuela. «Cuando conseguí una maestra integradora, la rechazaron», añadió. 

La madre de la menor intentó hablar con el dueño del establecimiento, le mandó un mensaje y él nunca le contestó.

«Yo quiero que mi hija continúe en la escuela. No le pueden quitar el derecho a la educación», concluyó.