Cuando se conoció el índice de inflación correspondiente al mes de septiembre de 2024, se supo también de cuánto sería el aumento de las prestaciones de la Seguridad Social, ya que por el decreto de movilidad jubilatoria vigente, éstas aumentan en razón del último índice de inflación conocido.
De esta manera la jubilación mínima en Argentina en el mes de noviembre será de $252.798 y el haber de la PUAM será de $202.238, mientras que el haber máximo será de $1.701.094.
Con el bono de $70.000 congelado desde el mes de marzo, los de la mínima llegarán a cobrar $322.798, y ese también será el tope por el cual se recibirá bono. Quienes cobren por encima de ese monto no recibirán bono alguno.
Al quedar fijo desde el mes de marzo ese bono, el aumento para los jubilados de la mínima ya no representa el 3,5%, sino entre el 2,3% y el 2,7%.
Tanto los jubilados con la mínima, como los que cobran PUAM o pensiones no contributivas, vienen recibiendo aumentos menores que los anunciados.
Todo indica que al menos por este año, el monto de dicho bono se seguirá manteniendo en $70.000.
Según la Oficina de Presupuesto del Congreso, los haberes mínimos de los jubilados cayeron un 6% real por la incidencia del bono que no aumenta.
En cambio, los haberes jubilatorios superiores a la mínima mostraron una recuperación del 10% respecto de diciembre 2023.
Hay que sumar además que a los haberes mínimos también se les quitó el reintegro del IVA en las compras hechas con tarjeta de débito, así como se achicaron los descuentos sobre los medicamentos de PAMI.