En el decreto 333/2023, publicado esta noche en un suplemento del Boletín Oficial, el presidente Alberto Fernández extendió los plazos establecidos en el cronograma del proceso de transición de la televisión analógica al Satvd-T.
El Gobierno estableció un nuevo cronograma del proceso de transición de la televisión analógica al sistema argentino de televisión digital terrestre (Satvd-T) para garantizar una transición ordenada y gradual.
En el decreto 333/2023, publicado esta noche en un suplemento del Boletín Oficial, el presidente Alberto Fernández extendió los plazos establecidos en el cronograma del proceso de transición de la televisión analógica al Satvd-T.
En sus considerandos, la norma firmada por Fernández y el jefe de Gabinete Agustín Rossi recordó que en 2009, cuando se creó el Sadtv-T, se estableció un plazo de 10 años con el fin de realizar el proceso de transición de la televisión analógica al mismo.
Posteriormente, se fijaron las condiciones de transición a los servicios de televisión digital terrestre abierta, con alcance para los y las titulares de licencias y autorizaciones para prestar el servicio de televisión abierta analógica que se encontraran operativas.
En 2022 se aprobó un cronograma con el fin de realizar el mencionado proceso de transición de la televisión analógica a la digital y se previó la apertura de un registro, por parte del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) tendiente a identificar a aquellos usuarios y aquellas usuarias que acrediten verse afectados y afectadas por la transición.
Además se estableció que el Enacom asignará los recursos que aseguren el acceso a los servicios digitalizados, para lo cual se garantizará la correspondiente partida en su presupuesto.
La norma revela que «distintos actores del sistema han solicitado la postergación de los plazos previstos en la normativa, con el objeto de poder realizar la transición sin afectación a los usuarios o con la mínima afectación posible, lo que no ocurriría en caso de procederse al apagón analógico en los plazos vigentes».
A ello se suma que «a la fecha se verifica un número escaso de usuarios y usuarias presentados en dicho registro, por lo que se torna necesario dar mayor publicidad al mismo, con el fin de minimizar el impacto que podría generar la finalización de la transición en las audiencias más vulnerables».
Asimismo, se verifican distintos grados de avance en la transición, según la localización de las emisoras involucradas y en función de sus particularidades y de su realidad económica y social, por lo que se consideró «necesario extender los plazos del cronograma».
Fuente: Télam