El estado de salud de Nicolás Rodríguez, el joven repartidor de 27 años que fue baleado durante un violento robo en Barranqueras, sigue siendo grave. Según el último informe médico del Hospital Perrando, emitido este martes, el paciente permanece internado en la Unidad de Terapia Intensiva (UTI), donde fue extubado y actualmente está siendo ventilado mediante máscara de reservorio. Aunque está despierto y sin sedación, su condición sigue siendo delicada, con pronóstico reservado.
Rodríguez presenta perforaciones pulmonares, hemoneumotórax y una lesión en la columna vertebral causadas por un proyectil de arma de fuego. Las heridas incluyen dos orificios en el tórax: uno en la zona posterior y otro en la zona anterior, sin que se haya podido determinar si son de entrada o salida, ya que el proyectil no ha sido localizado.
El joven sigue bajo observación constante, tras haberse sometido a una cirugía de urgencia para intentar estabilizar su delicado cuadro clínico.