Los rescatistas dejan dulces y bebidas cada 200 metros para que el chico del que nada se sabe desde el jueves pasado. Huellas, un botín y restos orgánicos son las pistas más fuertes
Pasaron cuatro días y cuatro noches desde que Loan Danilo Peña desapareció en el paraje rural Algarrobal de la localidad de 9 de Julio, en la provincia de Corrientes. La premisa de los investigadores parte de que el chico de 5 años sigue vivo, está solo y perdido en el monte. Por ello, decidieron dejar postas con chupetines y bebidas cada 200 metros, con la esperanza de que el niño las encuentre, coma algo dulce y se hidrate. Mientras tanto, el personal encargado de la búsqueda trabaja en turnos de 12 horas peinando la zona.
«Para Loan, no tocar», reza el papel escrito con letras negras que está pegado en los conos anaranjados. A los pies de la posta, que se encuentran cada 200 metros, hay varios chupetines y caramelos y una botella con bebida. Todo recurso es válido para que el chiquito no se deshidrate hasta que lo encuentren.
Hay que recordar que el fiscal del caso, Juan Carlos Castillo, dijo este lunes que la principal hipótesis es que Loan se perdió ese jueves cuando se separó del grupo de niños y de adultos con el que estaba cerca de la casa de su abuela, buscando naranjas. Los tres mayores de edad están detenidos por abandono de persona, mientras que los menores declararon en Cámara Gesell.
Mientras tanto, un botín encontrado en el barro, y reconocido por la familia del nene y por los chicos que estaban con él cuando se alejó porque quería volver con su papá. Es la prueba más firme que tienen los investigadores. También hallaron huellas de pies descalzos y restos de vómitos y materia fecal que, se sospecha, podría ser del niño, pero que queda ad referendum de los análisis para determinar si es así.
«Encontramos algunos indicios de una huella de un niño y, por eso, se reestructuró el rastrillaje en las inmediaciones del lugar. Pero no dejamos de hacer la búsqueda donde se encontró la zapatilla, varios kilómetros a la redonda. Y se activó un plan que cuenta con más de 300 efectivos, en turnos de 12 horas», explicó el jefe de la Policía de Corrientes, Alberto Arnaldo Molina.
Y añadió: «Estamos trabajando en toda la zona donde se perdió. Los pobladores están colaborando y pudimos inspeccionar muchas hectáreas de campo y viviendas también, de forma voluntaria. También se hicieron allanamientos y hay un vehículo secuestrado y elementos que van a ser revisados por la Policía».
Justamente, a la gente del Ejército que envió el Gobierno, más los drones, las divisiones K9 se ha sumado también la Policía de Misiones, según el jefe policial.
La búsqueda de Loan se disparó con el Alerta Sofía. Este lunes, Interpol lo puso en Alerta amarilla y el ministerio de Seguridad de la Nación decidió ofrecer $5 millones de recompensa a quien aporte un dato que permita dar con el paradero del niño.
Loan se perdió el jueves pasado, cuando luego de ir de visita a la casa de su abuela, un lugar al que no había ido antes; salió junto a su tío, una pareja de amigos del hombre y otros niños a buscar naranjas. En ese contexto, y según contó el fiscal del caso, «el niño se adelantó y, de ahí, tomó otro rumbo; el nenito se perdió».
Y siguió: «El chico dijo: ‘Me voy con mi papá’. Los adultos estaban más atrás cuando esto sucede. Los otros niños contaron que Loan se adelantó y jugaron como una carrerita», describió. Así fue como lo perdieron de vista.
«Es un lugar muy difícil, con mucha vegetación, inaccesible a vehículos. Desde los drones y parapentes, a quienes les agradecemos la ayuda, no se ve lo que hay en el monte. Es a caminata, con machete y abriendo camino, como se puede llegar. Hay lugares inaccesibles», aclaró el fiscal.
Lo cierto es que el funcionario detuvo al tío y a la pareja de amigos del hombre por el delito de abandono de persona. Este lunes le dictaron la prisión preventiva. El papá de Loan dijo que él no les dio permiso para llevarse al nene.