Néstor Daniel Aguilar Soto, también conocido por el apodo de “Nuni”, tiene 21 años y es oriundo de San Carlos de Bariloche, habiendo sentado residencia en la capital cordobesa hace poco más de dos años para estudiar arquitectura.
La misma carrera de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) donde era compañero de estudios de Catalina Gutiérrez, y ambos integraban el mismo grupo de amigos que solían compartir encuentros sociales.
En principio, declaró como testigo, ya que era con él y otros amigos con quien la víctima se iba a encontrar en la noche del miércoles. Pero se quebró y terminó confesando el crimen. Además, los investigadores confirmaron a través de la ubicación de los celulares que esa noche habían estado juntos para dirigirse a una juntada en un bowling del Patio Olmos.
El sospechoso había pasado a buscar a su compañera para concurrir juntos. Se cree que él estaba obsesionado y celoso porque Catalina se había puesto de novia con otro compañero. La habría atacado en el auto, causándole la muerte, para luego intentar prender fuego el vehículo y así ocultar pruebas.