Johana Colla tenía 30 años y fue encontrada sin vida en la habitación de un hotel de San Pablo, Brasil, el sábado por la madrugada. En las últimas horas se dio a conocer el resultado de la autopsia. Las dudas de la familia.
En el marco de la investigación que se lleva adelante en torno a la muerte de Johana Colla, la fisicoculturista de 30 años que viajó a competir a San Pablo en un torneo sudamericano del que salió subcampeona y horas después apareció sin vida en la cama del hotel en el que se alojaba, en las últimas horas se habría confirmado que su deceso ocurrió «naturalmente», a causa de un paro cardíaco, «sin hallarse ninguna sustancia ni ningún rastro de violencia».
Por estos momentos, el cuerpo de la joven se encuentra en el Instituto de Medicina Legal de San Pablo donde fue reconocido por la pareja de la deportista. Se espera que en las próximas sea repatriado, de manera, que se estima que entre este martes y el miércoles ya estará en Buenos Aires, según manifestó Jorge Asp, presidente de la Federación de Fisicoculturismo.
La joven, oriunda de Lomas de Zamora el miércoles pasado, había viajado a Brasil para competir en uno de los torneos más importantes de Sudamérica, en el que obtuvo el segundo lugar, pero el sábado por la madrugada, la competidora fue encontrada muerta en la habitación de su hotel.
Crecen las dudas en torno a la muerte de Johana Colla:
Sin embargo, la familia de Johana, quien era mamá de dos nenas de 10 y 7 años, tiene sospechas respecto a la repentina y sorpresiva muerte de la deportista. Y sostienen que el último tiempo había sido víctima de amenazas. «Estaba llena de salud» y por lo que posteaba en sus redes sociales, «se la veía sana, fuerte y alegre», sostiene María Cristina, mamá de la víctima.
«Tenemos dudas y más dudas. Acá no cierra nada ni por ahora se salva nadie», dice Carmen Colla, hermana mayor de la fisicoculturista.
Y agrega: «Todas son preguntas en torno a la muerte de Johana. Esto no fue una muerte súbita, como están diciendo. Antes de viajar a San Pablo el día miércoles, mi hermana ya me había dicho que había recibido amenazas para que no viajara. ¿De quién? No sé. Pero llamativamente viajó sola, sin su entrenador y sin su sponsor. Nunca viajaba sola y a ella también le sorprendía».
A su vez, la hermana mayor de la deportista hizo hincapié en las amenazas que recibió el últimpo tiempo Johana, según le había comentado.. «Me comentó con insistencia lo de las amenazas, me dijo que en su rubro hay mucha competencia en el ambiente y tenía miedo, y yo sólo le dije que no viajara, que se quedara acá, con las nenas, pero Johana amaba el deporte, se mataba entrenando y se había pagado el pasaje con su plata», expresó.
También, hay dudas respecto a porqué la joven no viajó acompañada por su entrenador, como solía hacer siempre. Aunque sí lo hizo, Jonathan, quien era su pareja.
«La organización la ubicó en una habitación de hotel con un hombre, otro competidor, Gabriel Cáseres, que apenas conocía de vista. Parece que este tipo intentó inyectarle alguna droga para dormirla y abusar de ella. Es lo que nos contó Johana, desde el hall del hotel, cuando se escapó de esa situación. ¿Cómo se explica?», se pregunta indignada Carmen.
El último sábado, Elizabeth, otra hermana de Johanna, recibió un mensaje de voz por whatsapp de quien era la pareja de Johana, en el que explicaba lo que había sucedido. «Johana convulsionó, se murió, no sé qué pasó. Yo me quedé dormido y cuando me desperté la vi en la cama, ella se movía raro, como si estuviera saltando», decía el audio.
En las últimas horas, la Federación Argentina de Fisicoculturismo emitió un comunicado en el que expresaba el pesar por la muerte de Johana, quien «mientras dormía sufrió un paro cardíaco», puntualiza en el primer párrafo, el que también puntualiza: «El personal médico del hotel y el Servicio Médico de Emergencia de Brasil, realizaron más de una hora de reanimación que fue, lamentablemente, infructuosa. El Médico actuante nos ha informado que fue una muerte súbita. Extendemos nuestro más profundo sentimiento de pedir para su familia y a toda nuestra comunidad culturista”.
«Las autoridades de la Federación nos hemos ocupado de los trámites legales y el acompañamiento a su pareja, quien se encontraba con ella en ese momento», dice el texto.