El ejército ruso lo demolió casi por completo este sábado. Además, Ucrania confirmó que perdió el acceso estratégico al mar de Azov.
La planta metalúrgica de Azovstal en Mariupol, al sur de Ucrania, fue destruida este sábado casi en su totalidad por el ejército de Rusia. Se trata de una de las más grandes de Europa, según informa el Ministerio del Interior ucraniano.
“Según nuestras informaciones, hemos perdido ese gigante económico. Una de las plantas metalúrgicas más grandes de Europa ha sido sistemáticamente destruida”, confirmó el ministro de Interior, Vadym Denysenko.
Y agregó: “Es imaginable que el presidente ruso Vladímir Putin haya dado personalmente la orden para destruir toda la ciudad. El objetivo de Putin no es desmilitarizar Ucrania, sino desindustrializarla y que tengamos que volver a construir nuestras plantas en las próximas décadas”.
Tiempo antes el territorio invadido había confirmado la pérdida “temporal” del acceso al mar de Azov. Según aseguraron agencias internacionales, las fuerzas rusas ya bloquearon la ciudad del Mar de Azov y su caída podría unir a Crimea.
La ciudad ucraniana había sido objeto de bombardeo el pasado miércoles. Se trataba de un teatro en el cual se alojaban civiles.
Tras horas de búsqueda y de trabajos de rescato y desescombro entre las ruinas, el ayuntamiento anunció el pasado viernes que habían sido rescatados con vida todos los civiles (alrededor de 1.300 -la mayoría eran mujeres, niños y ancianos-). Éste bombardeo dejó un herido, pero no hubo muertos.
Tras esto, se dio a conocer una nueva imagen de satélite, la cual muestra cómo quedó el establecimiento tras el ataque.