El Ciclón cayó por la mínima ante Atlético Tucumán en la última jugada y los hinchas no perdonaron a nadie. Caliente clima en la previa del duelo ante Atlético Mineiro por la Libertadores.
San Lorenzo no puede levantarse ni futbolísticamente ni institucionalmente. El equipo dirigido por Leandro Romagnoli cayó 1-0 ante Atlético Tucumán en un encuentro correspondiente a la décima fecha de la Liga Profesional. El gol de Renzo Tesuri en la última jugada del partido provocó la ira de la gente presente en el Nuevo Gasómetro que no perdonó a nadie: hubo insultos hacia el presidente Marcelo Moretti.
El Ciclón vivió una escandalosa tarde frente a Atlético Tucumán en su estadio. En medio del fuerte cruce entre Néstor Ortigoza y Marcelo Moretti que dio como resultado pasacalles a favor del exfutbolista, San Lorenzo tampoco pudo responder en lo futbolístico: venía de quedar afuera frente a Vélez y quedó en los últimos puestos del torneo.
El presidente y el, por ahora, mánager se cruzaron públicamente con declaraciones cruzadas. Luego de algunas situaciones cruzadas con relación a cambios en el fútbol juvenil y refuerzos, Néstor Ortigoza no se guardó nada: «Cuando me fueron a buscar fue para que me encargue del fútbol. Hoy, van siete meses y contra Independiente no me dejaron pasar, pusieron pasacalles, traen refuerzos en Reserva y me saltean. Estoy tomando la responsabilidad de lo que no decidí».
Moretti, este viernes, no se quedó callado y hasta se atrevió de revocar de su cargo al ex futbolista: “Le agradezco a Néstor por siempre haberme acompañado, pero, a partir de ahora, va a seguir desde otro lugar». Además, le tiró un fuerte palo: “Ortigoza no es un mal muchacho, pero le falta formación para el cargo”. Finalmente, al referirse a las fuertes declaraciones del excapitán e ídolo del club fue claro: «Creo que lo supera la situación». Negó que hubiera maltratos entre ellos y dijo que “hay una relación de respeto, es un ídolo del club, después hay etapas que van mutando».
Si bien los hinchas antes del comienzo del encuentro frente al Decano alentaron y aplaudieron a sus jugadores, el clima cambió repentinamente con el gol sobre el final del partido. Primero, porque llegó de una equivocación defensiva y segundo porque el equipo llegó a su cuarto seguido sin ganar. Tras el tanto de Tesuri que le dio el triunfo al equipo de Facundo Sava, la gente arrancó con la clásica canción: «Que se vayan todos, que no quede ni uno solo».
Sin embargo, no todo terminó ahí. Una vez que Leandro Rey Hilfer marcó el pitazo final del partido que hizo que los Gauchos de Boedo queden en el puesto 25°, con chances de ser pasado por Defensa y Justicia en esta misa fecha, el escenario se calentó mucho más. Moretti fue insultado por todo el estadio y luego los jugadores se fueron al vestuario con silbidos por parte del público.
Lo cierto es que el Ciclón tiene una prueba de fuego el próximo martes ante Atlético Mineiro por la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores y habrá que estar atento a la reacción de los simpatizantes del conjunto azulgrana.