La empresa aseguró que los incrementos que habían anunciado eran por el «gran desfasaje» que se dio por el aumento de los costos. Mantienen un porcentaje por encima del que deberían facturar si se ajustan a los números
«La cuota correspondiente al mes de mayo será un 22,22% (veintidós con 22/100) menor a la notificada el día 27 de marzo del corriente», informó la prepaga Swiss Medical en una comunicación que envió a sus afiliados.
La reducción del monto que se había informado con anterioridad se dio luego de una fuerte tensión del sector con el Gobierno de Javier Milei, y obedece a la intervención que llevó adelante la Secretaría de Comercio ante subas aceleradas en los costos.
La medida planteó una contradicción del Gobierno, que se muestra contrario a la intervención estatal, sin embargo la Casa Rosada debió hacerlo por las consecuencuas de la liberación total de precios decidida en diciembre por medio del DNU 70 de desregulación de la economía.
Se trata de una baja de 22% con respecto a lo que se había anunciado, que se traduce en un 11% menos, aproximadamente si se tiene en cuenta la factura del mes anterior. Se espera que haga lo mismo OSDE, la prepaga más grande del país.
«Es muy importante para nosotros transmitirle que los incrementos realizados en estos meses son el resultante de reducir, en parte, el gran desfasaje generado entre el aumento de nuestra estructura de costos y las cuotas autorizadas por la autoridad competente hasta diciembre de 2023. Este desfasaje se acentuó de forma exponencial en el último trimestre del 2023, en el que terminó por generarse una diferencia acumulada del 62,6% entre la inflación y las cuotas de medicina prepaga», agregó el texto de Swiss Medical.
Por medio de un cuadro que se incluye en la carta, la empresa intentó demostrar, con números oficiales, «que los aumentos de las cuotas del sector de la medicina prepaga entre enero de 2020 y diciembre de 2023 fueron significativamente inferiores a la variación del Índice de Precios al Consumidor nivel general elaborado por el Indec (IPC), al incremento en el precio de los medicamentos y a la variación del dólar oficial».
En el gráfico intentan demostrar que entre enero de 2020 y diciembre de 2023, los medicamentos e insumos médicos aumentaron 1.361% (en la comparación de inflación versus aumento cuota prepaga en ese período), contra 667% de las prepagas.
Diferencias con el Gobierno
El Gobierno nacional ordenó hoy que el 75% de las empresas de medicina prepaga bajen el precio de sus cuotas, ya que deberán recalcular los aumentos que aplicaron desde diciembre tomando como base para el cálculo el Índice de Precios al Consumidor.
Después de esa medida inicial, la semana pasada amplió la cautelar contra las prepagas que inició la Superintendencia de Servicios de Salud y son 23 las empresas investigadas. «No se trata de una intervención del mercado sino justamente lo contrario: una acción que lleva adelante la Superintendencia en su rol de fiscalizador para que se transparenten los indicadores y se garantice la libre competencia», destacaron fuentes oficiales.
Las empresas comenzaron a rehacer sus esquemas de precios con descuentos, según les ordenó el Gobierno. «El monto o porcentaje de rebaja depende de los aumentos aplicados por cada empresa. Según lo que sabemos es promedio un 25% menos del valor que hubiera resultado de aplicar los aumentos anunciados con 30 días de antelación», dijo días atrás un empresario del sector.
Una de las que ya empezaron a facturar con rebajas fue Medimas, una entidad sin fines de lucro con planes lowcost para los estándares de la industria. Las facturas de mayo están llegando a los afiliados con recortes del 6% respecto al mes pasado. Si la rebaja se mide contra el aumento que estaba previsto para ese mes, y que no se concretó, estaríamos hablando de un recorte del orden del 12,5 por ciento.
Osde está por enviar las facturas de mayo y la reducción, mes contra mes, estaría rondando 11%. Si se compara con la suba que estaba planificada, el recorte sería del orden del 22 por ciento.
Un ejemplo concreto para uno de los planes de cobertura más masivos del país, calculado para un matrimonio, muestra que beneficiarios que pagaron en marzo $340.000 y que iban a recibir en abril una factura por $387.600, terminarán teniendo que pagar $302.600 tras el descuento impuesto por el Gobierno.