Una mujer de 37 años fue asesinada a puñaladas en una calle de la ciudad mendocina de San Rafael y por el femicidio fue detenida su ex pareja, un hombre al que había denunciado por violencia de género y que tenía una restricción de acercamiento.
La víctima fue identificada por la policía como Natalia de Valle Tegua (37), madre de tres hijos y trabajadora en un comedor comunitario, quien fue atacada a puñaladas anoche en el cruce de Luzuriaga y Paula Albarracín, de San Rafael, cuando regresaba a su casa tas cursar la escuela nocturna.
El acusado, en tanto, es Antonio Sáez (41), quien había sido pareja de Tagua, aunque ésta lo había denunciado por violencia de género, por lo que tenía una prohibición de acercamiento.
El femicidio motivó que distintas organizaciones sociales expresaran su repudio y convocaran a una marcha en reclamo de justicia.
«Justicia por Natalia! Natalia Tagua tenía 37 años. Anoche salía de la Escuela donde estaba haciendo la primaria y su femicida la estaba esperando para arrebatarle la vida. Tristemente nos arrebataron a una compañera, madre de tres hijos y trabajadora del comedor Madres Cocinando», manifestaron en las redes sociales integrantes de Campaña por Emergencia Nacional en Violencia contra las mujeres San Rafael.
Además, agregaron: «Una vez más no alcanzaron las medidas tomadas por la justicia para cuidar las vida de las mujeres. Antonio Sáez, el femicida, tenía restricción de acercamiento hacia Natalia».
«Estamos #Hartas, cuántas más vamos a tener que contar?! Exigimos la declaración de la Emergencia en violencia contras las mujeres departamental, provincial y nacionalmente. #Hoy en San Rafael acompañamos el pedido de Justicia. Nos concentramos en Km 0 a las 18h», finaliza el comunicado.
Una de las docentes del Centro de Educación Básica para Jóvenes y Adultos (Cebja) de San Rafael, Laura Hernández, donde asistía Tagua, recordó ante los medios que horas antes habían compartido con Natalia una jornada sobre violencia de genero de la Dirección General de Escuelas (DGE).
En este sentido, la docente dijo: “Como educadores sentimos que nada alcanza, casi sin herramientas porque participamos de jornadas para abordar la prevención de la violencia de género pero cuando llegamos a la parte de la Justicia, ahí nada funciona bien”.
Y se lamentó, al asegurar que “si bien hay denuncias de las mujeres y prohibiciones de acercamiento por parte de la justicia, luego suceden estos crímenes”.
Según los investigadores, Sáez contaba con una restricción de acercamiento que le impedía residir en el misma localidad.
Según las fuentes, tenía residencia a varios kilómetros de San Rafael y, además, debía presentarse semanalmente ante la justicia, trámite que no cumplió esta semana.
Ante esa situación, de acuerdo a lo que establecieron los investigadores, el pasado 19 de octubre, se hizo un pedido de paradero sobre su persona.
El jefe de distrital de la policía de Mendoza, comisario Pablo Domínguez, explicó que «cerca de las 22.30 de anoche entró un llamado a la línea de emergencia 911 en la que se escuchaba a una pareja discutiendo, por lo que un móvil se arrima al lugar y los policías ven a la mujer ensangrentada en su rostro y al ciudadano que sale corriendo”.
“En este contexto- agregó Domínguez- se desplazan dos unidades al lugar y con características del agresor, el segundo móvil, logra aprehenderlo en la zona y cinco minutos después se logra dar con el arma homicida. Además, quiero expresar mis condolencias a la familia”.
El femicidio ocurrió cerca de las 22.30en esa ciudad ubicada a unos 200 kilómetros de la capital de Mendoza, cuando Tegua fue sorprendida en la vereda por su ex, quien luego de un breve intercambio de palabras comenzó a apuñalarla, según dijeron los voceros policiales.
Como consecuencia del ataque y los gritos de la mujer, vecinos dieron aviso a la policía mediante un llamado a la línea de emergencias 911, mientras que el agresor, que se autolesionó en el pecho con la misma arma blanca, escapó a pie del lugar.
Un móvil policial llegó a la zona y constató la presencia de la mujer herida en la calle, por lo que resguardó el lugar a la espera de una ambulancia, cuyos médicos establecieron que Tegua ya había fallecido debido a las lesiones.
Personal policial trabajó en la zona y, en base a datos aportados por testigos, desplegó un operativo que condujo a la detención de Sáez, quien debió ser asistido en un hospital por los cortes que presentaba, aunque está fuera de peligro.
Asimismo, los investigadores hallaron en las inmediaciones un cuchillo con manchas de sangre que se cree utilizó el femicida, el cual quedó a disposición de la fiscalía de turno para ser sometido a peritajes.
De la investigación surgió que Sáez había sido liberado hace unas semanas luego de ser denunciado por violencia de género y debía presentarse ante la Justicia periódicamente, lo que no hizo, explicaron los voceros.
Natalia era integrante del comedor Madres Cocinando, organización social que tras el femicidio expresó en las redes: «Qué dolor tan grande ha quedado hoy día en nuestro corazón, se nos adelantó en este viaje nuestra gran compañera, amiga, hermana, hija, madre. Siempre te vamos a amar Natalia Tagua, siempre estarás en nuestros corazones, en estos momentos sentimos que nuestro corazón se ha roto en mil pedazos. Tu gran sueño era aprende a leer y a escribir, eras la niña de la Casa Madres Cocinando».