“Hoy no vemos ninguna posibilidad de acuerdo”, dijeron desde el entorno cercano a Mauricio Macri. Cuáles son las críticas de la Casa Rosada.
El acuerdo político entre La Libertad Avanza y el PRO se encuentra cada vez más complicado. Tras meses de disputas, las tensiones aumentaron cuando Diego Valenzuela, intendente de Tres de Febrero, decidió pasarse a las filas oficialistas. “La gente, y sobre todo el votante del PRO que lo puso como intendente, no va a estar a gusto con este nuevo Borocotó”, deslizaron desde el entorno de Mauricio Macri.
La decisión de Valenzuela no fue lo único que generó malestar dentro del PRO. La falta de respuesta a la propuesta de trabajar en conjunto del expresidente tampoco gustó: “Se desentendieron en 24 horas”.
“Hoy no vemos ninguna posibilidad de acuerdo en ningún distrito. El Gobierno no responde a las intenciones que el mismo Presidente expresa públicamente”, agregaron en la órbita del presidente del PRO.
Hace unos días, Macri puso a disposición un equipo de cinco personas para trabajar con integrantes del Gobierno. El objetivo principal, según explican desde el espacio, era combatir al kirchnerismo.
Sin embargo, en Balcarce 50 no aceptaron la intención: “Es una propuesta al aire de algo que se debería hablar tras bambalinas”. Además, creen que no es momento de acuerdos políticos y prefieren que las elecciones estén más cerca para realizar más movimientos.
Otro episodio que generó molestia en la Casa Rosada fue el pedido del PRO para que el Presupuesto 2025 sea incluido en el temario de las sesiones extraordinarias. “Por eso hace tiempo que Milei y Macri no comen milanesas”, chicaneó un funcionario.
El comunicado decía que la exclusión del cálculo anual alejaba a la Argentina de la democracia participativa y reforzaba una visión autoritaria. La publicación del texto en redes sociales generó la reacción de gobernadores y legisladores, que se apresuraron a despegarse de la crítica de su partido.