Un comerciante fue brutalmente atacado con una llave inglesa después de que un delincuente lo engañara para robarle. Tal como contó la familia de la víctima, el atacante, que era conocido del barrio de la víctima, se acercó a pedirle un vaso de agua y luego intentó ingresar al local.
El incidente se produjo alrededor de las 18 de esta viernes, en Arijón 1300, en la zona sur de Rosario, el local estaba cerrado y el delincuente se acercó. Cuando el dueño del comercio volvió para darle el agua, el otro hombre lo empujó hacia adentro de la propiedad mientras le decía “quedate quieto”, según describió Jesica, hermana de la víctima, en dialogo con Telenoche.
“Sacó una llave inglesa y le empezó a pegar en la cabeza”
Instantes después de la agresión, la hermana de la víctima, que trabaja en otro local cercano, fue alertada. “Recibí un llamado de la vecina, (preguntándome) si podía venir. Vine rápido, porque me imaginé que había pasado algo, y me encontré con mi hermano, quien estaba todo ensangrentado en la vereda, donde lo estaban asistiendo los vecinos”, dijo.
En la reconstrucción de los hechos, se mencionó que el agresor frecuenta distintos locales de la zona. “(Fue) una persona que suele pasar a limpiar vidrios en el negocio; a veces incluso aparece con el hijito, le damos agua, a veces también le damos plata de más”, dijo Jesica.
Antes de la agresión, el dueño del local y el otro hombre estaban conversando. “Dice (el agredido) que le pidió agua (no sé si para tomar o para limpiar), que estaban hablando bien sobre las fiestas y cómo la habían pasado, y cuando le abrió la puerta lo empujó para adentro”.
Fue entonces cuando comenzó a gritarle “quedate quieto”, según el relato de la hermana de la víctima. Ante esto, su hermano “reaccionó y, cuando lo hizo, (la otra persona) sacó una llave inglesa y le empezó a pegar en la cabeza”. El ruido por el altercado llamó la atención de los vecinos y salieron a ver qué había pasado.
El estado de la víctima
El hecho ocurrió el viernes 10 de enero. En las inmediaciones del lugar, había manchas de sangre. “Por suerte, nunca perdió la consciencia”, dijo Jesica. “Dentro de todo, está bien. Solo tiene un gran tajo en la cabeza y tienen que hacerle puntos”, precisó al momento de la entrevista. Luego, la víctima fue trasladada al Hospital Roque Sáenz Peña, donde recibió asistencia y se quedó para ser evaluado más adelante porque varios de los golpes fueron en la cabeza.
“No podemos ni siquiera darle agua a alguien porque te roban”, dijo. Durante la entrevista con Telenoche, la hermana de la víctima no pudo indicar las pérdidas económicas en el local, donde se venden accesorios para celulares y se pueden pagar distintos servicios. La policía se presentó en el lugar para las distintas pesquisas relacionadas con el caso. El agresor escapó, junto con otro delincuente, en una moto roja.