El gobierno prohibirá desde 2022 la venta de cigarrillos a todas las personas nacidas después de 2008, con el objetivo de que los actuales niños y púberes no lleguen a fumar.
Nueva Zelanda acelera gestiones para que en ese país, cualquier persona nacida después de 2008 no pueda comprar cigarrillos o productos derivados del tabaco en toda su vida. Y la prohibición tendrá el sello de la ley, una vez que se promulgue, previsiblemente en 2022.
«Queremos asegurarnos de que los jóvenes no empiecen nunca a fumar», dijo la ministra de Sanidad, Ayesha Verall, en el marco de la campaña gubernamental contra el humo que el país realiza desde 2011.
«Por eso, a partir de ahora será un delito vender o suministrar productos relacionados con el tabaco a los jóvenes menores de 14 años», aseguró Verrall al calificar de «histórica» a la medida.
La campaña busca crear un ambiente sin humo para el año 2025 y promete abordar el daño que el tabaquismo ya ha causado a los habitantes de Nueva Zelanda, que causa una de cada cuatro muertes en el país y que es más común en las comunidades maoríes, del Pacífico y aquellos con bajos ingresos.
«Si la situación no cambia, pasarán décadas hasta que la tasa de tabaquismo en la comunidad maorí caiga un 5%», aseguró Verrall.
«Al evitar que las personas comiencen a fumar y al ayudar a aquellos que fuman a dejarlo, es cubrir ambos extremos del espectro».
Estas reformas también restringirán los niveles de nicotina en los cigarrillos. «Esto ayudará a la gente a dejar de fumar o a cambiar a productos menos dañinos y hará mucho menos probable que los jóvenes se vuelvan adictos a la nicotina», afirma la profesora Janet Hook, de la Universidad de Otago.