Las mordeduras del bulldog le generó una pérdida irremontable de sangre. Ocurrió en Gran Bretaña.
Un perro mató a un niño en Gran Bretaña tras morderlo reiteradas veces mientras su mamá se encontraba en una fiesta, informó el diario Mirror.
El bulldog americano, que era de una amiga que se encontraba de caravana con su madre drogándose y bebiendo, lo atacó, provocó múltiples heridas y la pérdida de sangre terminó con su vida.
La patóloga forense aseguró que las lesiones encontradas en el cuello y en la cabeza del fallecido se corresponden con el comportamiento de algunos perros peligrosos.
El hecho ocurrió en abril. La mujer dejó solo a su hijo con el perro y al regresar a ver cómo dormía lo encontró cubierto de sangre. Si bien llamó a los servicios de emergencia, ya era tarde y no pudieron reanimarlo.