Los ejercicios se realizarán poco después de que Rusia y Corea del Norte firmaran un pacto de cooperación.
Un portaaviones estadounidense de propulsión nuclear, el Theodore Roosevelt, llegó
el sábado a la ciudad portuaria surcoreana de Busan para participar a fines de mes en unas maniobras militares conjuntas con la nación anfitriona y Japón.
Los líderes de los tres países acordaron en una cumbre en agosto realizar ejercicios anuales de entrenamiento militar con el fin de proyectar unidad frente al creciente poder de China y las amenazas nucleares de Corea del Norte.
Las maniobras de este mes, denominadas «Freedom Edge», incluirán ejercicios marítimos, de guerra antisubmarina y de defensa aérea, explicó el contralmirante estadounidense
Christopher Alexander, comandante del grupo de ataque 9 del portaaviones.
«La intención es mejorar la interoperabilidad entre nuestras armadas y garantizar que estamos preparados para responder a cualquier crisis o contingencia», declaró en rueda de prensa, indicando que el Theodore Roosevelt actuaría como buque de mando de los ejercicios.
El año pasado, los tres países también realizaron maniobras navales conjuntas de defensa antimisiles y antisubmarinos para mejorar la respuesta a las amenazas norcoreanas.
El presidente ruso, Vladimir Putin, visitó Corea del Norte esta semana por primera vez en 24 años y firmó un acuerdo con el líder Kim Jong Un que incluye un compromiso de defensa mutua.
Fue una de las iniciativas más significativas de Rusia en Asia en años, que Kim describió como una alianza.
La visita se produce siete meses después del viaje a Corea del Sur de otro portaaviones estadounidense, el Carl Vinson, en una muestra de disuasión ampliada contra los programas nucleares y de misiles del Norte.