El Municipio de Resistencia llevó a cabo diferentes tareas preventivas en busca de reducir los índices de siniestralidad vial. Esto permitió que se remitieran cinco vehículos al corralón, y sus respectivos conductores sancionados por alcoholemia positiva, y veintidós por falta de documentación. Además se registraron denuncias por ruidos molestos y hubo fuerte vigilancia en espacios públicos y privados.
Los trabajos fueron coordinados por la Secretaría de Gobierno, con la presencia del subsecretario de Tránsito y Seguridad Ciudadana Matias Breard y la jueza de Faltas Municipal, Matilde Campias.
Breard informó que se registraron un total de 27 vehículos en falta.»Hemos tenido un trabajo arduo en general, donde los inspectores identificaron a 22 conductores con irregularidades en sus documentaciones y 5 en estado de alcoholemia positiva».
Con respecto a los gramos de alcohol en sangre más altos de la madrugada Matias indicó, «Los registros más altos, fueron 1.32 g/l y 1.84 g/l; más de tres veces lo permitido para conducir. Estos casos nos preocupa mucho y pedimos a los ciudadanos respetar las normas vigentes en pos de mejorar la seguridad en las calles de nuestra ciudad».
En referencia a el área se la dirección de control acústico, agregó, «del jueves a la fecha, recibimos 60 denuncias, de las cuales 2 fueron fiestas clandestinas de gran magnitud con música y aglomeración de personas».
El operativo de mayor envergadura tuvo lugar en Arbo y Blanco al 850 donde se pudo observar un grupo de jóvenes esperando para ingresar al local. En el lugar se hizo presente la Jueza de faltas municipal Matilde Campias y se procedió a finalizar el evento y confeccionar las actas correspondientes.