Se trata de Sancta, que fue presentada en la ciudad de Stuttgart. Considerada «blasfema» por la Iglesia, recibió fuertes criticas.
Una fuerte ola de críticas se desató en Alemania hacia la ópera Sancta, clasificada para mayores de edad y llena de escenas explícitas de sexo y violencia, que se estrenó el sábado en la Ópera Estatal de Stuttgart. Según distintos reportes de la prensa de ese país, hubo espectadores que sufrieron náuseas, vómitos y lipotimias, y varios que no aguantaron la obra y abandonaron la sala.
La ópera se basa en la obra del compositor Paul Hindemith, que fue incluida en el repertorio de la entidad cultural un siglo después de que su creador afrontara un fuerte repudio por el texto, que fue tachado de «blasfemo».
Después de las dos primeras actuaciones, el servicio al público del teatro tuvo que atender a un total de 18 personas, algunas de las cuales tenían náuseas, mientras que en tres casos fue necesario llamar a un médico, según Sebastian Ebling, el portavoz oficial de la obra.
Los actos sexuales explícitos, escenas de amor lésbico, representaciones de abuso sexual y la ridiculización de ritos cristianos fueron los desencadenantes que provocaron la reacción del público. Sin embargo, la entidad cultural recomienda el espectáculo, a cargo de Florentina Holzingera, a un público que «busca atrevidamente nuevas experiencias teatrales», ya que, según Ebling, además del uso de algunos medios teatrales, el arte escénico «no es falso sino real».
A pesar de las quejas por parte del público, Ebling aseguró que las cinco veladas previstas no serán canceladas, incluso ya agotaron las entradas, y expresó que confía en que la mayoría de los asistentes eran conscientes «en lo que se metían».