Una mujer declaró que viajó en taxi con la víctima al hotel de Mendoza, donde ocurrió el abuso sexual denunciado, y dijo que «se notaba con qué intención iba».
Una testigo declaró esta semana en la causa por abuso sexual que pesa contra dos rugbiers de la selección de Francia y reveló que la víctima y los acusados «iban a los besos» en el taxi rumbo al hotel Diplomatic de Mendoza, donde el equipo se hospedaba tras derrotar a Los Pumas.
Mientras Hugo Auradou y Oscar Jegou, ambos de 21 años, siguen instalados en Mendoza a la espera de que la justicia argentina les permita salir del país, la causa dio un giro gracias a la declaración de una testigo oriunda de Godoy Cruz, quien sostuvo «se notaba que iban a tener sexo» con la denunciante.
Auradou y Jegou conocieron a la denunciante, de 39 años, en el boliche Wabi de la Ciudad de Mendoza. Ahí también estuvo la testigo, de 24, que viajó con ellos en un taxi al hotel Diplomatic, donde ocurrió el abuso sexual denunciado a principios de julio.
«Creo que a mitad de la noche vimos a los franceses. Estuvieron bailando con nosotras, yo estuve con uno», reveló la testigo, que concentró su atención en otro de los integrantes del seleccionado de Francia.
Mientras tanto, la denunciante y uno de los rugbiers «iban a los besos, y ella se iba riendo. Ya se notaba con qué intención iba», señaló ante la Justicia de Mendoza con el abogado de los acusados, Rafael Cúneo Libarona le preguntó si podía aclarar a lo que se refería.
«Que iban a tener sexo», precisó la testigo.
El relato de la mujer es clave porque hasta el momento, el fiscal Gonzalo Nazar sostiene que no hay pruebas suficientes para requerir la prisión preventiva de los rugbiers. En este sentido, el fiscal también aseguró que la víctima tuvo contradicciones a la hora de declarar y en el examen forense presentado, no encontraron lesiones en sus partes íntimas. No obstante, aún se esperan los resultados de las pericias psicológicas.
Mientras tanto, el relato de la mujer de Godoy Cruz se sumó a la declaración del team manager de la Selección de rugby de Francia, Patrick Arlettaz, quien aseguró que vio a la denunciante en el ascensor del hotel a la mañana siguiente del episodio, cuando se retiraba del hotel.
Las cámaras del hotel corroboraron el relato de Arlettaz porque en una grabación del 7 de julio se ve a la mujer ingresar a las 08.43 en el ascensor del hotel, según se cree, después de abandonar la habitación de Auradou y Jegou.
Apenas 20 segundos después se subió al ascensor el manager francés, que estaba alojado en otro piso del hotel y tenía que reunirse con el plantel para marcharse de Mendoza. Ninguno de los dos se dirigió la palabra, pero se observa cómo la denunciante le sonríe y, posteriormente, el entrenador salió del ascensor y ella siguió su recorrido.