La vuelta de Leandro Paredes marcó un cierre casi definitivo en el armado del plantel, aunque el colombiano es del gusto de Miguel Ángel Russo.
El nombre de Diego Valoyes volvió a sonar en Boca y el delantero colombiano de 28 años, con pasado en Talleres de Córdoba y actualmente en el Juárez de México, fue ofrecido al club de la Ribera.
Valoyes es un viejo anhelo de Juan Román Riquelme y de Miguel Ángel Russo, que lo consideraban una pieza clave por su desequilibrio sobre el sector derecho del ataque. Sin embargo, la operación no se vislumbra sencilla: aunque el atacante no es tenido en cuenta en México —donde quedó fuera de varias convocatorias—, desde Brandsen 805 aseguran que con la llegada de Leandro Paredes el libro de incorporaciones está prácticamente cerrado.
Boca ya había intentado fichar al colombiano en 2023, cuando brillaba en la «T», pero no pudo afrontar los seis millones de dólares que pedían desde Córdoba. Actualmente, con un escenario financiero más ajustado y al filo del cierre del mercado (24 de julio), la situación no parece haber cambiado demasiado.
Aunque el perfil de Valoyes sigue siendo del gusto del cuerpo técnico y de la dirigencia, todo indica que su desembarco deberá esperar, a menos que ocurra una salida imprevista.
En ese sentido, hay nombres importantes que podrían dejar el club. Sergio «Chiquito» Romero tiene encaminada su salida: ya hay acuerdo con Newell’s en caso de que Keylor Navas concrete su llegada a los Pumas de México.
El arquero no es tenido en cuenta por Russo ni por la dirigencia tras el polémico episodio con socios luego de la derrota ante River en septiembre de 2024. Con contrato hasta diciembre, Romero —como Marcos Rojo— sabe que necesita acercar una oferta formal para sellar su salida antes del vencimiento.
Otro que está próximo a cambiar de club es Marcelo Saracchi. El lateral uruguayo pasará a préstamo a Independiente por 18 meses.
Solo resta acordar el monto de la opción de compra. Ante la consolidación de Lautaro Blanco y el retroceso de Frank Fabra a segundo suplente, Saracchi perdió lugar en la consideración y busca minutos.
A nivel organizativo, Boca sigue sin recibir visitantes en el torneo local —aunque sí lo hace en competencias internacionales por exigencia de Conmebol— y no se descarta que sus hinchas recién puedan volver a ver al equipo fuera de casa en la quinta fecha, cuando visite a Independiente Rivadavia en Mendoza.
Esto se debe a la negativa de Huracán, su rival del próximo domingo, de habilitar el ingreso de público visitante en el Ducó.
Mientras tanto, el plantel se entrena en el predio de Ezeiza, con la mira puesta en el duelo por los 16avos de final de la Copa Argentina frente a Atlético Tucumán.
El encuentro será este miércoles en el estadio Madre de Ciudades, en Santiago del Estero, y contará con el arbitraje de Hernán Mastrángelo. De avanzar, el próximo rival será Newell’s, que también espera en esa llave.