La investigación comenzó en agosto del año pasado contra un bunker donde se vendía cocaína, pasta base y marihuana.
Una mujer fue detenida acusada de estar detrás de la venta de drogas en la localidad bonaerense de San Justo y en la investigación se supo que el responsable de dichas maniobras era su pareja, apodado ‘el chileno’, que se encuentra privado de su libertad y cumple su condena en el penal de Devoto.
La investigación inició en agosto del año pasado a raíz de una denuncia efectuada en la Unidad Funcional de Investigación y Juicio N°14 Temática de Estupefacientes Departamental, a cargo de Fernando Amador López, en la cual se señalaban maniobras de comercio de cocaína, pasta base y marihuana.
Como resultado de amplias tareas investigativas, “se estableció que el implicado era cabecilla de una organización dedicada al acopio y venta de estupefacientes al menudeo y que utilizaba un celular en interior del penal, como así también el aparato telefónico asignado al pabellón en el cual se encontraba alojado, donde se comunicaba con su pareja a quien le daba diferentes directivas para que ella se encargue de organizar las maniobras delictivas”, detallaron desde la Policía Federal.
Por este motivo, los efectivos dirigieron la pesquisa sobre dicha mujer y determinaron que la misma se encargaba de la “entrega y organización de la venta de estupefacientes en distintos puntos de distribución ubicados en el interior del barrio de emergencia conocido como Barrio ‘Villa Palito’ de la localidad de San Justo”.
Además, se comprobó que hacia el recambio de distintas personas mayores y menores para la comercialización de las sustancias.
Con el total de las pruebas recabadas, el Juzgado de Garantías N°1 del Departamento Judicial de La Matanza, a cargo de Mary Mabel Castillo, ordenó cuatro allanamientos.
Durante los operativos, uno en el Servicio Penitenciario Federal de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y tres restantes en la localidad de San Justo, fue detenida la pareja del cabecilla.
Asimismo, se secuestraron 1.372 dosis de cocaína con un peso de 2,7 kilos, 3.584 dosis de marihuana con un peso de 17,9 kilos, 1.900 dosis de pasta base con un peso de 1,9 kilos, todas listas para su distribución. También se secuestraron una pistola marca Bersa calibre .22 milímetros, una pistola marca Glock modelo 17 calibre 9×19 y con cargador extendido de 31 cartuchos a bala, cargadores y municiones de diferentes calibres, una escopeta de aire comprimido, 29.370 pesos, diez teléfonos celulares, cinco cámaras de seguridad, tres balanzas de precisión, dos máquinas para contar dinero y elementos de interés para la causa.
La detenida, argentina de 35 años, junto a los elementos incautados, quedaron a disposición al magistrado interventor por infracción a la Ley de Drogas.