En el marco de la edición número 59 del Festival de Jesús María, Diego Torres protagonizó una noche cargada de emociones que quedará en el corazón de los presentes. En su debut en el escenario de dicho espectáculo, el cantante invitó a Vicky Robledo, una niña de 12 años que enfrentó una dura batalla contra el cáncer, a interpretar junto a él la icónica canción «Color esperanza».
El show, que comenzó cerca de las 23, marcó el debut de Torres en uno de los escenarios más prestigiosos del país. Desde el inicio, el artista demostró su cercanía con el público, interactuando constantemente con los asistentes y recorriendo su extenso repertorio de éxitos. Su conexión con los espectadores fue evidente, saludando y abrazando a quienes se acercaban al borde del escenario y asegurándose de incluir a las tribunas laterales en la experiencia.
El momento más emotivo de la noche llegó cuando Vicky, desde el público, captó la atención del cantante. La joven, quien batalló con el cáncer toda su vida, siempre sintió una cercanía con el cantante. Por eso, sin dudarlo, Diego Torres la invitó al escenario. La química entre ambos fue instantánea, y juntos interpretaron una versión profundamente conmovedora de «Color esperanza», una canción que, en ese instante, trascendió generaciones y adquirió un significado aún más especial.
Pero la historia no terminó allí. Tras el espectáculo, Torres se reunió con Vicky y su madre en camarines. Fue allí donde la madre compartió detalles sobre su vínculo con la canción: ambas participan en un campamento para niños con cáncer llamado Color Esperanza. Además, reveló que la niña había recibido el alta médica apenas unos días antes, lo que les permitió disfrutar del festival.
Con esta actuación, Diego Torres no solo dejó su huella en el escenario Martín Fierro, sino también en los corazones de quienes vivieron esta noche única, marcada por la música, la esperanza y la magia del encuentro.