La jurado tuvo que elegir entre dos integrantes de su equipo pero antes de hacerlo se despachó con un duro mensaje. Una alerta para el resto de los integrantes.
La Voz Argentina avanza y se acerca a las instancias finales. Luego de las presentaciones a ciegas, de que cada uno de los jurados haya conformado sus equipos, ahora están en la etapa de las batallas, en la que dos participantes del mismo bando compiten entre ellos para que tan sólo uno avance. Acá se busca rigurosidad y esto se vio en el enojo de Lali Espósito. La artista, que días atrás se emocionó, ahora vivió todo lo contrario.
Julieta Silberberg y Micaela Sabra, interpretaron el tema Baby Can I Hold You, de Tracy Chapman. Al finalizar, cuando a Lali le tocó inclinarse por una de las dos para que continúe en su equipo, comenzó: “Yo, a diferencia de mis compañeros, no voy a ser tan amorosa”. Con esto se diferenció de Ricardo Montaner, Sole Pastorutti y Mau y Ricky, que también dejaron sus impresiones como para ayudarla a decidirse.
Ya en tema, dando a entender que no estaba a gusto, indicó: “Tengo otra tarea con ustedes y por eso estoy acá. Entiendo el nervio, esto va a sonar re mal y no quiero se mala onda. Pero no estuvieron a la altura para nada, ni en el programa ni en esta instancia, ni en el equipo y ni con sus compañeros que tienen dentro del equipo”.
“Ninguna vino a ganarse el lugar en el programa. Habíamos escuchado con Álex Ubago el ensayo y nos quedamos emocionados porque lo habían hecho bien. Entiendo los nervios pero estamos en un momento decisivo y lo digo con todo el respeto del mundo porque las dos cantan lindo: hoy no me quedaría con ninguna”, agregó.
Para finalizar, y antes de elegir a Silberberg, siguió con su mirada sobre lo visto y lo que busca: “Este programa es una escuela a mil por hora para los que nunca se hayan subido al escenario. Quiero que quien se quede esté hiper consciente de que tiene que estar para esto”.