Un joven de 28 años fue detenido este domingo por la noche tras violar las restricciones judiciales que pesaban sobre él en una causa de violencia de género. El sistema de monitoreo detectó que el hombre había cortado la pulsera electrónica que debía portar y, gracias a la geolocalización del dispositivo, fue ubicado en el barrio Luchemos Juntos.
El implicado, domiciliado originalmente en el barrio Luz y Esperanza, estaba bajo control mediante un dispositivo dual, parte de las medidas impuestas por la Justicia para proteger a la víctima. Sin embargo, alrededor de las 19:45, el sistema emitió una alerta indicando que el transmisor había sido manipulado o cortado, lo que encendió las alarmas del Departamento de Violencia Familiar y de Género.
Los operadores intentaron establecer contacto con el hombre a través del dispositivo, pero no obtuvieron respuesta. Ante esto, se activó el protocolo de emergencia y se dio intervención a la División Delitos Contra las Personas, que rápidamente comenzó las tareas de localización.
Mediante la última señal registrada por el sistema, los agentes llegaron hasta el barrio Luchemos Juntos, donde tras un rastrillaje lograron dar con el sospechoso. Al momento de ser detenido, aún tenía el dispositivo en su poder, aunque con la pulsera cortada, lo que constituye una clara violación de las medidas de restricción impuestas.
La fiscalía de turno ordenó su inmediata detención por el delito de “supuesta desobediencia judicial en contexto de violencia de género”. El hombre fue alojado en la Comisaría Octava y quedó nuevamente a disposición de la Justicia, que deberá resolver su situación procesal tras este nuevo incumplimiento.