La ministra de Salud, Carla Vizzotti, aseguró que ante la declaración de la viruela del mono como emergencia en salud pública por parte de la OMS, se requiere «acciones coordinadas internacionales» y en el país, «contacto con los equipos de salud que trabajan en territorio», tras la aparición de 32 casos en la Argentina, informó el Ministerio de Salud.
La ministra, durante un encuentro en el que se capacitó a 500 profesionales de distintas provincias sobre esta enfermedad, compartió los detalles de un plan centrado, además, en «fortalecer la vigilancia epidemiológica, descentralizar el diagnóstico de laboratorio y generar acciones de prevención y comunicación».
«La situación requiere acciones coordinadas internacionales», dijo Vizzotti por lo que desde su cartera comenzó a desarrollarse un plan para el abordaje de la viruela símica
Esto incluye «el contacto con los equipos de salud que trabajan en territorio, que son fundamentales para brindar información a la comunidad sobre la prevención y para identificar precozmente cualquier caso sospechoso», dijo la ministra.
En la Argentina, al momento hay 32 casos confirmados, todos de sexo masculino (8 en Buenos Aires, 18 en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 4 en Córdoba, 1 en Mendoza y 1 en Santa Fe).
Además, el 78 por ciento tenía antecedentes de viaje, mientras que el resto mantuvo contacto con un viajero o caso confirmado. Los síntomas más frecuentes que presentaron fueron exantemas vesiculares, fiebre y dolor muscular.
Durante el encuentro con los equipos de salud la directora nacional de Epidemiología e Información Estratégica, Analía Rearte, aseguró que las vías de transmisión interhumana, más frecuentes son «el contacto estrecho con lesiones cutáneas o mucosas de una persona enferma, especialmente contacto estrecho sexual».
En este sentido, Rearte mencionó el contacto sexual (con o sin preservativo) con personas con viruela símica como así también con lesiones de piel, costras o fluidos; asistencia a eventos en los que haya contacto sexual con múltiples personas, besar o acariciar a sintomáticos o casos confirmados son actividades de alto riesgo de contagio.
También compartir la cama, sábanas, toallas o elementos de uso personal; compartir bebidas y mate con personas con la enfermedad.
«Por ello es importante evitar el contacto estrecho con casos confirmados y con personas que tengan síntomas compatibles, aunque no tengan todavía el diagnóstico», dijo Rearte
«Como así también con aquellos contactos o personas que hayan realizado actividades consideradas de alto riesgo», precisó la funcionaria para los que recomendó realizar «automonitoreo de síntomas durante 21 días, para detectar tempranamente la posible aparición de lesiones».
La directora también enumeró aquellas actividades de bajo riesgo como utilizar el transporte público, compartir el espacio laboral, usar baños públicos, hacer compras, ir a una consulta o intervención médicas, asistir a clases en espacios cerrados, concurrir a piletas y gimnasios o probarse ropa en un comercio.
Rearte también se refirió al manejo de los casos y de sus contactos estrechos y adelantó que en los próximos días se publicarán las guías para el personal de salud.