«Voy a salir y te voy a matar a vos y a tus hijos»: acusado del asesinato de un colectivero amenazó a la viuda en pleno juicio

Sergio Ariel Armoa le gritó a la mujer e hizo el gesto de apuntarle con un arma cuando ella declaraba como testigo.

Uno de los dos acusados de asesinar a un colectivero durante un asalto cometido en el partido bonaerense de Merlo en junio de 2020 amenazó de muerte en pleno juicio a la viuda de la víctima cuando declaró como testigo contra él y el otro detenido por el hecho, informaron hoy fuentes judiciales.

«Hija de puta, voy a salir y te voy a matar, a vos y a tus hijos», dijo a los gritos el acusado Sergio Ariel Armoa (37) mientras realizaba el gesto de apuntar con un arma hacia Andrea Caballero, viuda del colectivero Federico Rivero (43) y testigo del asesinato.

Inmediatamente, el detenido fue retirado de la sala de audiencias del Tribunal Oral Criminal (TOC) 5 de Morón por personal penitenciario y quedó excluido del debate, agregaron las fuentes.

El episodio ocurrió en la primera audiencia del juicio que se les sigue a Armoa y a Jonathan Acosta (27), alias «Jony», por el robo seguido de homicidio del chofer de la empresa La Perlita, de Moreno, cuando esperaba a bordo de su auto que su mujer finalizara de hacer unas compras en un almacén del barrio La Blanquita, de Libertad, partido de Merlo.

Ayer, cuando la viuda de Rivero declaraba sobre el hecho ante los jueces Marcos Javier Lisa, Julia De La Llana y Gabriel Sotelo y reconoció y señaló con el dedo a Armoa y a Acosta como los responsables, el primero a los gritos la amenazó.

Si bien el testimonio de Caballero fue contundente en cuanto a la participación en el crimen de los imputados, la mujer no pudo decir cual de los dos fue el que disparó el arma contra su marido y padre de sus hijos ya que, según dijo, se pasaban el arma de uno a otro.

El debate continuaba hoy con otros testigos citados por la fiscal del juicio Graciela Biassoti, entre ellos de policías que participaron en los allanamientos para detener a Acosta y a Armoa y de la abuela del primero.

El crimen de Rivero fue cometido el 16 de junio del 2020, cerca de las 20, cuando el chofer y mujer detuvieron su auto para realizar compras en un almacén del barrio.

Según la viuda del policía ambos se trasladaban en su Renault Sandero azul y se detuvieron en un comercio situado en Sucre, entre Esquiú y Finochietto, del barrio La Blanquita, donde ella bajó a comprar una gaseosa mientras su marido se quedó a bordo del auto en marcha.

En esas circunstancias, Rivero fue abordado por dos asaltantes que quisieron robarle, aunque se resistió e intentó bajar del rodado.

«Ahí siento el tiro y el grito de él», recordó la mujer que estaba a pocos metros y que, al regresar al auto, encontró a su marido caído hacia un costado, con medio cuerpo colgando hacia afuera, ya que los asaltantes intentaron sacarlo para llevarse el rodado.

La mujer alcanzó a sacar la llave del vehículo y forcejeó con uno de los ladrones, quien escapó con su cómplice tras apoderarse de los teléfonos celulares de la pareja, de una riñonera con 500 pesos y documentos que estaban al lado de la palanca de cambios.

Caballero llevó a su esposo herido hasta el hospital Eva Perón, aunque Rivero sufrió tres paros cardíacos cuando era intervenido y murió debido a que el proyectil que lo impactó le ingresó por la axila a la altura del hombro derecho y le afectó los pulmones y el corazón.