El caso judicial parece cerca de llegar a su fin luego de una pericia a la denunciante en la que «se advierten contradicciones entre diferentes partes de la narración, no logrando la dicente salvar las mismas de manera convincente».
El rugbier internacional francés Hugo Auradou, acusado de violación en Argentina, volverá a jugar con el Pau el sábado en Perpiñán (sur), en un partido del Top 14, anunció este viernes el mánager del club Sébastien Piqueronies.
«Le hemos metido en el grupo. Empezará el partido», declaró el técnico en conferencia de prensa sobre el segunda línea.
«No es una sorpresa, lo han visto entrenar con nosotros, el día de que vuelva a un terreno de rugby ha llegado y será mañana. Nada le impide jugar a rugby, es presuntamente inocente. Hoy corresponde a quienes le defienden y a la dirección del club asumir la coherencia como lo han hecho desde el principio», añadió.
Auradou y el tercera línea de La Rochelle Óscar Jegou, ambos de 21 años, están acusados de violación agravada con participación de dos o más personas por unos supuestos hechos que ocurrieron la madrugada del 7 de julio en la habitación del hotel donde se hospedaban en Mendoza tras jugar un partido amistoso de la selección francesa contra los Pumas argentinos.
La mujer afirmó haber sido brutalmente violada y golpeada por ambos, mientras ellos nunca negaron las relaciones sexuales pero negaron todo tipo de violencia.
Estuvieron detenidos poco más de un mes, primero en Buenos Aires y luego en Mendoza. La fiscalía los liberó a mediados de agosto y les permitió regresar a Francia tras encontrar que la acusación inicial de la denunciante había perdido fuerza. Viajaron el 4 de septiembre, aunque el caso no ha finalizado.
Hugo Auradou regresó a los entrenamientos el 9 de septiembre y se sumó a los colectivos a mediados del pasado mes. Jegou volvió a ejercitarse la semana pasada con La Rochelle, pero no se sabe cuándo regresará a la competición.
Audiencia de sobreseimiento
En Argentina el recorrido del caso puede estar cerca de su fin. Tras validar la pasada semana una evaluación médica, psiquiátrica y psicológica de la denunciante, la fiscalía debe fijar una fecha para examinar la solicitud de sobreseimiento -es decir, el cierre del caso antes de llegar a juicio-, según fuentes en Mendoza (oeste).
«El juzgado va a ordenar una audiencia de sobreseimiento donde cada una de las partes vamos a tener el derecho de defender nuestras posturas», dijo a la AFP Rafael Cúneo Libarona, uno de los abogados de los rugbiers.
Después de esa audiencia, el juzgado se tomará unos días más para resolver definitivamente el caso, prosiguió.
La pericia de la denunciante, realizada por expertos enviados por la fiscalía y a la cual AFP tuvo acceso, señala que «se advierten contradicciones entre diferentes partes de la narración, no logrando la dicente salvar las mismas de manera convincente».
Los dos profesionales que firman la pericia afirman que, en el relato de la mujer de 39 años, «el hilo conductor es laxo y disperso, tendiendo a brindar aspectos positivos de sí misma o detalles que exceden el objetivo de lo investigado».
«El relato no es libre ni espontáneo y está teñido de evidentes influencias externas, fundamentalmente de su amiga D.», señala la pericia psicológica.
Según los expertos, la denunciante reconoció que no habría presentado la denuncia si su amiga no la hubiera convencido de que había sido víctima de una agresión sexual. Su madre también habría contribuido a convencerla.
La abogada de la denunciante no respondió a las consultas de la AFP.
La denunciante sí habló el jueves ante una comisión de derechos humanos de la legislatura de la provincia de Mendoza y dijo que sus derechos fueron «vulnerados» por la justicia local.