Condenado por darle leche envenenada a una beba recién nacida

El hombre fue sentenciado a 25 años de cárcel por intento de asesinato.

Un hombre de 21 años quiso envenenar a una beba recién nacido luego de buscar en Internet las formas de hacerlo.

Los hechos ocurieron el 27 de junio de 2020 y ahora Jamar Bailey fue condenado a 25 años de prisión en el Reino Unido.

Ese día la madre de la beba sintió que no estaba bien tras un llanto poco habitual de la chiquita y la trasladó a un centro médico.

«La beba se despertó llorando.los llantos parecían diferentes, por lo que su madre llamó al 111 (emergencias). Al día siguiente, la alimentaron por un corto tiempo. Cuando volvió a despertarse, no estaba agarrándose al pecho y sus brazos simplemente cayeron hacia atrás», contó el fiscal  William Boyce.

Y añadió: «Llamó a una ambulancia de inmediato. Estaba muy enferma, hipotérmica y no respondía al estímulo. La investigación inicial se centró en una posible infección. Estaba inestable y fue trasladada a la UCI pediátrica. Fue ventilada y recibió tratamiento por niveles elevados de amoníaco. Su madre siempre estuvo presente en el hospital».

En el hospital los médicos le realizaron exámentes a la menor y detectaron en la orina rastros de valporato de sodio, un medicamento que se usa para tratar la epilepsia y el trastorno bipolar.

Un informe de toxicología determinó la presencia de la droga en su mamadera.

Los investigadores obtuvieron acceso al teléfono celular de Bailey y en el historial búsquedas que contenían las frases «cómo envenenar a un bebé» y «cómo matar a un bebé recién nacido», informó The Birmingham Mail.

Además, la Policía descubrió que Bailey estaba tomando medicamentos para las convulsiones y halló un medicamento recetado que contenía valporato de sodio en su nombre, según la BBC.

Los médicos le dijeron a los agentes que la droga no pudo haber sido ingerida accidentalmente, que la beba podría haber entrado en coma y haber sufrido daño hepático y presión arterial baja.

De acuerdo con la sargento detective Kirsty Wilson, la beba tuvo «suerte de estar vivo», aunque los efectos del consumo de esa droga se terminarán de ver más adelante.

A partir de los testimonios y las pruebas, Bailey se declaró culpable de intento de homicidio y de posesión con la intención de suministrar a una menor una droga controlada de Clase B.