El joven cantante rosarino, que la rompe con sus canciones y colaboraciones con otros artistas, dejó el secundario. Por qué lo hizo y qué explicación dio.
A los 16 años, Valentino Merlo se convirtió en uno de los cantantes del momento, con miles de reproducciones en todas las plataformas y cuyas canciones causan furor por todos lados. Está en la cresta de la ola, es oriundo de Rosario y aun está cursando el colegio secundario pero tiene el foco bien claro: quiere seguir creciendo en la industria y dejar una huella indeleble en quienes escuchan sus temas.
Fue su abuela Aurora quien le dio el primer empujón para hacerse conocido. «Ella fue fundamental. Estábamos en la pileta del Saladillo cuando canté un tema de Abel Pintos, Cactus, y mi abuela me grabó. Mis dos abuelas, Aurora y Marta, me pagaban las clases de canto porque en mi casa no se podía cubrir ese gasto y las dos fueron el pilar de todo esto», contó en charla con el periodista Nico Peralta.
«El video que se viralizó cantando en la pileta lo grabó mi abuela y se súper viralizó. Hace poco fui a la pileta a verla porque me hicieron un mural enorme con mi cara. ¡Es re loco eso! Increíble. Cada día tengo una sorpresa nueva y me encanta. Uno trabaja para eso pero nunca sabés qué va a pasar», completó Valentino.
¿Qué dicen sus abuelas de tu presente tan exitoso? El lo explicó así: «No lo pueden creer. Las dos están chochas, re contentas y disfrutando un montón de lo que nos pasa a nivel familiar. Las visito re seguido a mis abuelas y me encanta comer guiso de lentejas con ellas. Lo más rico que hace Aurora es el puchero y Marta, el guiso de lentejas».
Cuando Peralta quiso saber si seguía yendo a la escuela, Merlo sorprendió con la respuesta. «A partir de este año, la idea es cursar virtual, no presencial. Estamos pidiendo la posibilidad de rendir las materias libres. Me quedan tres años para terminar el colegio secundario, que es técnico», reveló.
¿Si tiene el proyecto de mudarse a Buenos Aires? «Sí. Hoy en día estamos viviendo en Buenos Aires por una cuestión de trabajo y de que todas las puertas están en Buenos Aires. Igual vamos y venimos a Rosario constantemente. En Rosario está mi familia, mis amigos y mi idea es repartirme entre una ciudad y la otra. La paso súper en los dos lados», concluyó el joven cantante.